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Hacemos un episodio 50 muy especial dedicado a la figura de Ada Lovelace, la primera programadora de la historia, y hablando sobre el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, analizando por qué se hace y cuál es su objetivo.
Promover el conocimiento de STEM en las mujeres y niñas de las nuevas generaciones.
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Transcripción
[Música] CUONDA, la comunidad de podcast independientes en español. Bienvenidos a Apple Coding Daily, Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia. [Música] Hoy vamos a hacer un programa especial para celebrar el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia que se ha celebrado el 11 de febrero de este año. Un día que pretende lograr la participación plena y equitativa en la ciencia para mujeres y niñas, para poder descubrirles el STEM. el STEM. STEM siglas de Science, Technology, Engineering and Mathematics. La ciencia dentro de su amplio espectro nos explica el mundo tal y como es o quiere explicarlo pero no de cualquier forma en base a conocimientos objetivos y lo más importante que puedan verificarse para determinar que son verdaderos. Una ciencia que establece unos métodos para verificar sus hipótesis y que trabaja en ramas teóricas o prácticas. Uno de los indiscutibles pilares que nos ha convertido en la sociedad que somos hoy día. Una sociedad que podrá gustar más o menos, que será más o menos injusta, no es perfecta y necesita mejorar mucho, pero es la mejor que ha existido nunca que se conozca en nuestra propia historia. Y uno de sus pilares es precisamente la ciencia y el conocimiento, porque el saber y el conocimiento nos hacen libres. La tecnología, como elemento genérico, representa el conjunto de instrumentos, procedimientos, recursos de un sector, así como sus conocimientos propios. Ésta ha permitido en la aplicación práctica de la ciencia la sociedad que hoy vivimos, las técnicas e instrumentos que permiten que hoy, por ejemplo, Internet nos deje ser más libres que nunca, que podamos hacer cosas que nunca soñamos hacer o acceder a toda la información que jamás soñamos poder acceder. Que se consigan hitos inimaginables para la humanidad hace apenas unas pocas décadas. Las herramientas del progreso. La ingeniería. La técnica. El arte de aplicar los conocimientos científicos. ¿Para qué? el diseño, la invención, el perfeccionamiento, para crear procedimientos en la industria y campos de aplicación científica. La ingeniería es la creación que usa la tecnología como herramienta y la ciencia como conocimiento. La ciencia, la tecnología y la ingeniería necesitan un idioma, las matemáticas. Un lenguaje cuyas principales herramientas son la lógica y el razonamiento, con el que estudiamos las relaciones entre entidades abstractas y que nos sirven para determinar las verdades, los axiomas, que nos permiten crear lo que en otros siglos podía ser considerado magia, pero que hoy día es ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas. Cuatro disciplinas interrelacionadas y dependientes entre sí que nos ayudan a ser mejor especie a través del conocimiento. (Música) No vivimos en una sociedad perfecta. Tenemos una sociedad donde cualquier influencia externa desde medios generales o en las mismas normas que ella se establece por algo tan arcaico como "la costumbre" hay partes que deben mejorarse. Una de ellas es la influencia que se ejerce para marcar los roles que diferencian a hombres de mujeres, los unos de las otras y las otras de los unos. Nos obligan a pensar que somos diferentes. Y es cierto, lo somos. Tenemos diferentes formas de pensar, de sentir, de razonar, de aprender, de realizar cosas. ¿Pero acaso no sucede lo mismo con el ser humano en sí? ¿No somos todos diferentes de unos a otros en nuestra individualidad, sin importar género, raza o creencia? Por lo tanto, una cosa es pensar en nuestras diferencias como individuos, y otra es en las razones autoimpuestas por la sociedad. Las mismas, por las que un anuncio en televisión educa a un chico que quiere el coche más potente, que ruja más, que mole más, y a la chica la invitan al mundo de la fantasía donde todo es necesariamente real, eterno y de color de rosa, literal y metafóricamente hablando. Son cosas de chicos, son cosas de chicas, pero ¿quién lo ha decidido? Son cosas y cada uno decidirá si son cosas de él o no, o de ella o no, fuera de cualquier estereotipo. Y eso sucede con STEM, con la ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas. Se dice que son cosas de chicos y no se les permite a las chicas descubrirlas, no se les facilita ese descubrimiento. Estas materias son lo suficientemente importantes como para niñas que ahora están madurando su personalidad tengan la posibilidad de descubrirlas. Y cuando se les permita descubrirlas, sin estereotipos, muchas de ellas se engancharán y por suerte, la nueva generación que ahora crece, tendrá muchas más mujeres en todas estas materias, muy necesarias, y la próxima aún más. Y al final conseguiremos que todo sea de todos, y ya decidiremos cada uno lo que queremos o no, y no esta sociedad a la que le cuesta evolucionar. Sirva este programa para intentar aportar un pequeño grano de arena a ese equilibrio hacia las personas y no a sus diferencias. Siendo Apple Coding y dedicándonos a la divulgación de las ciencias de la computación en la rama de la programación y al descubrimiento de la tecnología y cómo funciona esta por dentro para buscar la pasión en la gente que no se escucha, qué mejor ejemplo que el del primer programador de la historia. Un programador que creó las primeras reglas matemáticas que sentarían las bases de lo que hoy es la programación. Una mujer, Ada Lovelace, hija del poeta inglés Lord Byron, nacida en 1815 que falleció en 1852 con sólo 37 años. Una mujer que tuvo que firmar sus trabajos con sus iniciales para evitar la censura social de la época por ser mujer. En 1842, con tan sólo 27 años, estableció las bases de lo que hoy día es la programación, en base a un descubrimiento de su amigo Charles Babbage, el precursor de la informática moderna que había diseñado un aparato que llamó la máquina analítica, algo que ni siquiera llegó a construirse completamente ni nunca funcionó en la práctica. Babbage tenía una historia larga como inventor y había realizado algunas máquinas que realizaban tareas específicas, como el motor diferencial, una máquina creada para calcular funciones polinómicas. Pero esta máquina estaba diseñada como algo que cumplía una función específica, solo servía para eso y nada más. Así que Babbage decidió que quería crear lo que llamó una máquina analítica, una máquina que pudiera ser usada para cualquier propósito para el que se la configurara, algo revolucionario. Esta máquina podía ser configurada para las operaciones que se querían realizar mediante tarjetas perforadas. La máquina podía realizar bucles para ir concatenando operaciones una con la otra, podía llevar un control secuencial de las instrucciones e incluso permitía bifurcaciones en tomas de decisión, además de los bucles mencionados. Pero esa máquina no tenía un lenguaje, no había un método que permitiera traducir desde cualquier ámbito hacia instrucciones que pudieran ser usadas en dicha máquina. Aquí es donde, en 1842, entró en juego Ada Lovelace, quien en base a esas herramientas ideó cómo representar un algoritmo que calculara la secuencia de los números de Bernoulli. no fue una colaboración directa por la época que vivían y el papel de la mujer a nivel social. En 1840, Babbage estuvo en Turín hablando de su máquina analítica y el matemático nacido en Francia, Luigi Federico Menabrea, quedó impresionado con su trabajo, escribiendo un artículo de análisis sobre dicho trabajo llamado "Esquemas de la máquina analítica inventada por Charles Babbage", escrita en francés. El científico inglés Charles Whitstone propuso a Ada Lovelace para traducir este trabajo al inglés y ella presentó al tiempo una traducción con notas propias que triplicaban la extensión original del artículo que traducía. Notas clasificadas por letras desde la A hasta la G, donde hablaba sobre cómo funcionaría esta máquina. Imaginó el potencial que tendría y en la sección G escribió un programa para la misma, el citado cálculo de la secuencia de números de Bernoulli. En esas notas Lovelace decía que la máquina analítica no tenía pretensión de servir para crear algo, simplemente podría hacer cualquier cosa que supiéramos ordenarle. Que la máquina podía seguir análisis, pero que no tenía el poder de anticipar ninguna relación analítica o verdades. Una afirmación que el mismo Alan Turing debatió en su famoso estudio "Maquinaria de computación e inteligencia" de 1950 que establecería las bases de la actual inteligencia artificial. Una idea con la que jugó Lovelace más de un siglo antes y donde llegó a teorizar que evolucionando esta máquina, algún día alguna máquina podría pensar por sí misma y crear. Lovelace decía en sus notas que con una máquina así se podría llegar a crear arte o música, que tejía patrones algebraicos como lo haría un telar de jacquard, que tejía flores y hojas. Un invento extraordinario del año 1801 que usaba las tarjetas perforadas para conseguir patrones que se tejían en la tela. de ahí que luego fueran usadas como primer medio para introducir información en estas máquinas u ordenadores. Debido a su clase social y la motivación de su madre, desde muy temprana edad a Ada Lovelace se interesó por las matemáticas y la mecánica. Fue con solo 17 años cuando conoció a Babbage, que le enseñó una calculadora que había creado de más de medio metro de tamaño, y quedó tan impresionada que estuvieron escribiéndose durante casi dos décadas sobre ciencia y matemáticas. Ada no paró ni un solo día de estudiar y de leer. Aprendió trigonometría, aprendió ecuaciones, y en 1840 pidió a un profesor de matemáticas, a Augustus de Morgan, que fuera su profesor a distancia por correspondencia, y éste le enseñó matemáticas hasta llegar al nivel que en aquel momento se impartía en las universidades. Quedó tan impresionado que de Morgan llegó a escribir a la madre de Ada para decirle que de haber sido un estudiante, hombre, en la universidad y demostrando las dotes que había demostrado, sin duda habrían hecho de él, de ella, un investigador de matemáticas de gran renombre y de primera categoría. Pero era mujer y estaba estudiando a distancia. La famosa traducción del artículo de Menabrea le permitió una forma de mostrar su talento y conocimiento de una forma discreta, tanto que tuvo que firmar, como ya hemos comentado, estas notas con sus iniciales. Unas notas donde realizaba un auténtico estudio que iba más allá del que traducía y donde la citada nota G no solo creó el algoritmo de la secuencia de los números de Bernoulli, estableció los principios abstractos de la computación. Definió las normas que han llegado a nuestros días sobre cómo representar un algoritmo matemático mediante abstracciones y pasos que pudieran dársele a la máquina de Babbage para realizar cualquier tarea que se quisiese, siempre y cuando se definiera en base a las normas que ella establecía en esta nota. Fue la norma de traducir cualquier cosa fuera del ámbito de la máquina a poder ser programada en esa máquina. Ada Lovelace pronosticó que este sería un lenguaje nuevo, vasto y poderoso, que se estaba desarrollando para el uso futuro del análisis, en el cual se pueden introducir sus principios con el fin de que tengan una aplicación práctica más veloz y precisa al servicio de la humanidad. [Música] [Music] [Music] Ada Lovelace no solo fue la primera programadora de la historia, fue la precursora de la programación, la que estableció sus abstracciones matemáticas que llegarían a nuestros días sobre cómo representar a través de un programa la resolución de un problema. Un ejemplo a seguir de mujer curiosa, investigadora, inconformista con el tiempo que le tocó vivir y que buscó sus oportunidades para dejar su huella en la historia y permitir que la humanidad fuera algo mejor. Algo que puede servir de ejemplo a esas mujeres y niñas en la ciencia, para acercarse a la ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas y descubrir ese maravilloso mundo, y tal vez descubrir en él la pasión que defina sus vidas e incluso que les permita cambiar la humanidad a mejor. [MÚSICA] [MÚSICA] [AUDIO parallelo]