Andrómeda y la Vía Láctea siguen un rumbo de colisión y ambas se fusionarán en el futuro para formar una nueva y gigantesca galaxia elíptica dentro de unos 4.500 millones de años
Andrómeda y la Vía Láctea siguen un rumbo de colisión y ambas se fusionarán en el futuro para formar una nueva y gigantesca galaxia elíptica dentro de unos 4.500 millones de años