Cuando los cuadros se pintaron con polvo de momias egipcias. Entre los siglos XVIII y XIX, algunos de los artistas europeos usaron un pigmento tan fascinante como macabro: el ‘marrón momia’. Obtenido a partir de restos triturados de momias egipcias -tanto humanas como de animales-, se mezclaban con resina y betún para dar el tono cálido y transparente, perfecto para los retratos y sombras. Pintores como Delacroix y Burne-Jones lo emplearon. Una práctica que finalmente decayó en el siglo XX por razones éticas y la escasez de momias.
Y descubre más historias curiosas en el canal National Geographic y en Disney +.
Publicado: 15 julio 2025