La incertidumbre antes del parto, la preocupación sobre la salud del bebé, la habilidad para amamantar y la capacidad para calmar al recién nacido son inquietudes comunes que todas las madres primerizas comparten. Pero lo que a menudo marca la diferencia es el apoyo y la sabiduría de quienes han recorrido este camino antes.
La psicopedagoga Mar García Sánchez, directora del Instituto Valenciano de Pedagogía Creativa, nos cuenta la principal duda que acecha a las madres primerizas: ¿Seré una buena madre?" La realidad es que es inevitable cuestionarnos constantemente si estamos haciendo lo correcto, ya que todos buscamos ser buenos padres. Sin embargo, el proceso de crianza es, en sí mismo, una lección constante y una experiencia maravillosa que, con creatividad y sentido del humor, se vuelve más llevadera.
La clave es reinventarse, aprender de los errores y, cuando sea necesario, buscar asesoramiento profesional. Confiar en tu instinto es esencial, ya que nadie conoce mejor a tu bebé que tú misma. Ser madre primeriza es una travesía única llena de desafíos, pero con apoyo y creatividad, encontrarás alegría en cada paso.