En cada etapa de crecimiento, los sentidos de tu hijo son las llaves que le abren las puertas al mundo. Los colores, las texturas, los sonidos y las formas son sus maestros más cercanos. Desde su nacimiento, tu pequeño comienza a explorar y entender el mundo que le rodea, y el juego es su guía. Los primeros juguetes se convierten en un compañero de aventuras, no solo para entretener, sino para estimular su curiosidad y fomentar su desarrollo motriz y cognitivo.
Ayudándole a descubrir el mundo con objetos contrastantes, brillantes y juguetes evolutivos, le animas a moverse, tocar y explorar. Los primeros movimientos, como estirar un brazo o seguir un objeto con la mirada, son los cimientos de un emocionante viaje que lo llevará desde reptar hasta caminar.
El desarrollo motriz y cognitivo infantil comienza desde el momento en que nace, y tu papel como guía es invaluable. Los colores, las formas y los sonidos serán las herramientas que capturan su atención, y tu paciencia y cariño serán su fuente de confianza.