Diáspora e identidad

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¿Puede un autor escapar de etiquetas nacionales? ¿Está obligado a escribir sobre su experiencia como minoría? En este capítulo hablamos de literatura y diáspora, de esas obras que nacen entre dos mundos, dos identidades, dos lenguas. Exploramos cómo la literatura se convierte en un espacio de resistencia y reivindicación, pero también cómo hay quien puede utilizar la identidad para colarse en las listas de ventas.

Obras en traducción (por orden de aparición):

  • Pachinko, de Min Jin Lee. Trad. (del original en inglés) de Eva González, Quaterni, Año 2018.
  • Amarilla, de Rl F. Kuang. Trad. (del original en inglés) de Patricia Enríquez, Editorial Hidra, 2023.
  • The End of August, de Yū Miri. Trad. de Morgan Giles, Tilted Axis Press, Año 2024.
  • Hierba, de Keum Suk Gendry-Kim. Trad. Joo Hasun. Reservoir Books, Año 2022.

Está por Leer es un podcast de literatura asiática contemporánea, la traducida y la que está por traducir.

Presentado por Ainhoa Urquia, investigadora y docente de cultura y literatura coreana, y Jordi Serrano, investigador y docente especializado en literatura japonesa y ecocrítica.

Publicado: 13 abril 2025

Transcripción


Esto de separar el la obra de de su autor, que yo creo que en ocasiones lo que hay que hacer es separar el autor de su cabeza.

¿Estás escuchando Está por leer? Un podcast sobre literatura asiática contemporánea, la traducida y la que está por traducir. Yo soy Nora Orquía.

Y yo soy Jordi Serrano.

¿Puede un autor escapar de nacionales? ¿Está obligado a escribir sobre su experiencia como minoría? Hoy vamos a hablar de literatura y diáspora, de esas obras que nacen entre dos mundos, dos identidades, dos lenguas. Exploraremos cómo la literatura se convierte en un espacio de resistencia y reivindicación, pero también cómo hay quien puede utilizar la identidad para colarse en las listas de ventas.

¿Qué tal, Aima?

Hola, Jordi. ¿Qué tal? ¿Cómo estás?

Todo bien.

Muy bien. Hoy siento que tengo la voz un poco tomada, no sé. No no es porque me haya portado mal ayer, yo creo que ayer me he portado bastante bien, he dormido bastante bien, pero bueno, no pasa nada, ¿no? Le da así un tono rasposo.

Bueno, quizá es cuestión aquí también de de la temporada, la mitad mitad temporada se nota que estás ya

Sí, sí, sí, ya ya estamos hablando.

Avanzando tiro cansancio.

Qué va, estamos a tope. Además, este episodio tengo muchas ganas de hablar de él, porque tenemos varios takes.

Hay varios takes en este episodio. ¿En qué episodio no hay varios takes ahora?

Sí, también es verdad. Pero yo creo que en este es como que salimos un poquito de la zona de confort, de ser tan amables y tan simpáticos. Pero, bueno, seguimos siéndolo, ¿no? Más o menos.

Hablando de techs, y yo quería llevarlo un poquito al al terreno de los de los premios, porque, bueno, tú lo repites mucho, el Premio Nobel de que ha de Hankahan, que si de tal, que si no sé qué, que si tienes este año de gracia para poder repetirlo por todos lados. Además, vas dando charlas por ahí sobre Hank Kangtu también, ¿no?

Exacto, sí, sí.

Que no se te da nada mal. Yo estaba pensando, bueno, vale, vale. Pero el Premio Nobel es un premio internacional, ¿no? ¿Qué hay de los premios nacionales en Corea? Porque yo lo pensaba y digo, bueno, claro, yo conozco los premios de Literatura Japonesa, pero los Premios de Literatura Coreanas como que no, no los piloto para nada.

Es que justo estábamos hablando off the record, estábamos hablando por de cámara sobre esto del del premio, que nunca lo sé decir bien, Akuta Gawa. Muy bien. ¿Bien? Está bien este premio japonés que claro, lo comentabas como si fuese algo como Vox Populi. Es verdad que yo estando lo había oído varias veces, no?

Pero como un poco referencia de que de que la gente fuera de Japón lo reconoce y lo lo lo identifica como un premio de entre decirlo, un sello de calidad de que ese autor o esa autora ha sido reconocida. Y hablamos otro día de las revistas literarias, no, de uno de los últimos episodios y y todas estas revistas literarias que hay en Corea. No sé si pasa lo mismo en Japón, no la Munatune, Muna Kasaje, todas las las revistas tienen su propio, su propio premio. También se los han llevado grandes números de la literatura coreana, pero luego también están los premios más reconocidos, que siento que fuera de Corea, pues no los conoce nadie. ¿No tenemos el Yisan, por ejemplo, que toma nombre de este poeta modernista de principios del siglo veinte.

Tenemos el premio De San, que también hace hace, bueno, el premio Dessam es como muy complejo porque tiene hay de Sam para todo, hay de Sam para autores, hay de Sam para las artes, hay como es como un premio nacional, digamos.

Pero son para son, se distinguen entre entre géneros. Por ejemplo, allí dicen dices que esta, toma el nombre de un de un poeta. ¿Es un premio de poesía?

No, no, no, no. Es un premio a la obra de un autor o una autora en general. Luego también hay, por ejemplo, hay premios para literatura de jóvenes, un teatro juvenil, hay premios también para poesía aparte, pero distintos premios de distintas como entidades o editoriales más o menos, más o menos conocidas, ¿no? Pero no necesariamente, el holly sang se le puede dar también a a literatura

narrativa. ¿Y son premios? ¿Tú crees que? O sea, en Corea se tiende más a dar premios a autores noveles o más premios a autores reconocidos?

Yo creo que autores noveles es es como una forma de entrar en el circuito literario, una forma de debutar. De alguna manera, es conseguir alguno de estos premios literarios de bien de las revistas literarias o editoriales reconocidas, o consolidarte de alguna manera como un autor o autora de referencia con alguno de los premios así más grandes. ¿No? Es cierto que que hay autores que han recibido, por ejemplo, las últimas autoras que han recibido el el I Sand, son autoras que ya tienen cierto recorrido y no son ni mucho menos su primera obra. Quizás Eliza en ese caso sea un poquito más, más allá.

No sé cómo será en el caso de de la Kutagawa, es que me cuesta muchísimo pronunciarlo.

Sí, porque es.

No lo sé. En

Kutagawa, ¿no?

Sí, Kutagawa.

A ver, el Akutagawa es un premio que se da, sobre todo, a, es un premio que se dice de bautizo literario. Es decir, sí se da a autores por obras, además, se se dan dos, en cada cada vez que se denuncian los los Akotagawa. Y se suelen ser, suelen ir destinados a autores que están que o ya han publicado muy poquito o o es su primera obra. Entonces, tienden a ser relativamente jóvenes y, sobre todo, sirve como para darles un impulso de visibilización y de promoción de de de marketing y de reconocimiento. Entonces, a partir de ahí, muchos de ellos es como que, pues entran a formar parte del del circuito literario y si consiguen mantenerse y seguir publicando seguir atrayendo, pues pues ventas y atención y otros premios, pues ya está.

Es como que forman parte de la rueda. La gran mayoría de los de de de autoras y autores que que reconocemos o que nos que nos llegan, han recibido en la Kutawa. Porque es un premio, se da dos, se falla dos veces al año. Y entonces, es como que, realmente, hay bastantes premios a Kutawawa, ¿no? Pero no todos los premiados luego sobreviven en en la larga carrera.

Hay excepciones bastante sonadas. La más famosa seguramente sea Muraka Miharuki, que nunca ganó una una cuota agua.

Ah, qué curioso.

Sí. Entonces, es como que es, y sin embargo, pues, vamos, es uno de los autores más populares de.

Qué curiosos.

Reconocidos dentro del canon.

Hankam sí que ganó un ISAN y lo hizo en el año dos mil cinco. Entonces fue hace un montón de tiempo antes de que se consolidara como autora en Corea prácticamente, y ya ni te digo, como diez años antes de que fuese como conocida o publicada en alguna lengua occidental. Entonces sí que sí que ahí sí que veo un poco de diferencias. Siento que hay pocos premios en Corea que hay tantos premios que es difícil que que haya algún autor que que o autora que se escape un poco de no ganar ningún premio. ¿Alguno ha tenido que ganar para poder entrar un poco en el circuito y haber conseguido un agente y haber conseguido un poco que que se vendan sus derechos en el extranjero, tiene que haber habido movimientos previo, aunque no se reconoce tanto el premio fuera.

Quizás eso ahora empiece a cambiar con el Premio Nobel y ya la gente pueda reconocer como ah, esta persona tiene un Nissan o tiene un de esa, no como una forma un poco adelantarse a las tendencias e identificar autores autores de referencia, ¿no?

Yo creo que al final esto también dependerá mucho de de las estrategias de marketing que tengan las editoriales fuera de Corea, porque al final esto es lo que se sigue también en Japón. Es decir, es verdad que se promociona cada vez que tienen un un premio, las editoriales también es verdad que esto es quién está gestionando los premios, ¿no? Si son entidades privadas o si son entidades públicas. Pero si tú lo utilizas como una como una excusa para promover libros, para vender libros, dentro de Japón funciona así. Y es que yo creo que fuera también.

Es decir, que se utilizan las fajas de los libros, en los en en el material promocional, si dice, pues ha ganado ganador del premio Kutawa, ganador del Gunso, ganador de el, no sé, de Mishima también. Y esto se utiliza tú, quizá, como lector de de fuera. A lo mejor, no dices, no, es que yo no tengo ni idea de qué es de cuál es este premio, pero si lo ves repetidas veces, dices, ah, es que a lo mejor esto significa que es

que es

un buen premio. Sí. Yo creo que esto, quizá, no lo están utilizando en literatura coreana, ¿no?

Es verdad, es verdad. Editoriales arroba está por leer, si queréis que que hagamos alguna alguna intervención en este sentido. Empezamos a poner el premio de San, lo bueno es que las actores coreanas, como todos han ganado alguna cosa, premio de San, premio Mura Murafone, premio Isang, algo ahí.

Es como que van un poco a peso, no, no,

no, no. Van al peso, van al peso.

Vaya, seguro que se la han trabajado mucho y que ha habido mucha

Sí, a mí me gusta mucho verlos los premios, ver quién los gana, un poco también para organizar un poco mentalmente dónde está, cómo se está moviendo el mundo literario dentro de Corea.

Sí, también hay como un poquito de de politiqueo detrás de de la serie. Siempre, seleccionando los premios literarios, siempre hay politiqueo, siempre hay cuestiones un poco más extrañas, siempre hay como ciertas lencillitas y ahí sirve bien. Yo creo que no es un barómetro, aquí hay que poner, siempre hay que relativizar la cuestión de los premios literarios, ¿no? Pero no es un barómetro exacto de hacia dónde va un canon literario en concreto. Pero sí es interesante ver en el caso de la Kutawawa, por ejemplo, durante la gran parte de la historia del del del premio era bastante, digamos que un poco conservador.

No a conservador en el sentido de, aunque al final estás premiando autores, noveles y en ocasiones, pues es es son los que empujan un poco o se atreven a experimentar, no siempre, pero suele ser esta tendencia. Pero sí en el perfil de la gente que lo recibía, ¿no? Pues la mayoría eran, pues señoros, como el presidente de Tokio, de clase media alta, el el, pues educados, etcétera. Y en los últimos quince quince años, más o menos, este ha ido cambiando. He ido recibiendo premios, pues perfiles un poquito más diversos.

Perfiles tan diversos como las mujeres. Madre mía, ¿sabes? Pero en eso también, claro, si tú empiezas a hurgar, ves que en el comité de selección, en el en el comité de jurado, de pronto es que ha habido también más mujeres autoras. Ah, ahí está. Curioso.

Ahí está la clave.

Entonces, no es una cuestión aquí de decir, joder, es que están haciendo la cuota. No, no, no, es una cuestión de de dar la oportunidad para incluir nuevos autores, incluir nuevas obras. También pongan en duda y y cuestionen el futuro de de de la de la literatura japonesa, y que también diversifiquen el el perfil de lo que se está de lo que se está leyendo o lo que se pueda llegar a leer, ¿no? En ese sentido, ahora en enero han salido, se han anunciado los últimos Akotagawa.

Ajá.

Y tenemos No

son sorpresas. ¿Tenemos sorpresas?

Pues, mira, o sea, si me dices hace quince años, te diría, sí, es relativamente sorpresa. A estas alturas ya no. Y creo que es como, tienes un poco de las dos partes, ¿no? Porque, por un lado, tienes que han han premiado, a ver si lo puedo pronunciar bien, porque es José Ando.

Ah, perdón.

Una obra que se llama.

Se llama José Ando.

José Ando. No te rías, está feo eso,

No, perdón, lo siento, o sea, el, esta es una, es un autor, autor, Autor. Sí. José, se llama.

José, sí. Creo que se lo escribe además con con en en en Catacana. Una obra que se llama Ditopia. Ajá. Y luego tienes, claro, este este autor tiene un background racialétnico diverso, mix.

No no vamos a entrar mucho más en detalle, porque él pide que no se entre mucho en detalle. Es decir, parte de esta de de su de esta propia experiencia como una persona en en, o forma parte de las minorías dentro de Japón, pero no quiere que se construya su identidad o su su proyección como autor, marcada por esta misma realidad. Pero claro, ya a partir de del del mismo nombre, pues ya llama un poco la atención y también trabaja ciertos aspectos de identidad dentro de de de sus obras. Pero es como que intenta separar esto de separar el la obra de de su autor, que yo creo que en ocasiones lo que hay que hacer es separar el autor de su cabeza.

Cuidado del trake. No, bueno, esto realmente a mí me me parece pensando sobre todo en el caso de Japón, que yo tengo asociado como un con Corea pasa parecido, ¿no? Pero es verdad que en Corea los premios pienso en el ejemplo de los Isang y y mirando hacia atrás tampoco tienen tanta historia, porque se establecieron un poquito casi, casi al inicio de la democracia, un poquito antes. Entonces no hay tanta. Ha habido un cambio muy acompañado ya de unos cambios sociales, con lo que muy desde el principio se premiaban a mujeres.

Quizás la proporción se ha ido un poco ampliando, no se ha hecho más proporcional, nunca mejor dicho, pero sí que tenemos poesía de tenemos, tenemos poetas que ya están reconocidas dentro del canon hace años y luego las últimas, los últimos y san, que han sido las últimas tres, que han sido mujeres. Entonces hasta ahí es verdad que entrar en entrar en la en minorías étnicas es algo que quizás es interesante que lo haga Japón, no? Porque también tiene una historia bastante intensa con esto precisamente, ¿no? Y en Corea todavía me da la sensación de que no se ha entrado todavía me da la sensación de que no se ha entrado todavía tanto a explorar desde el ámbito literario dentro de las fronteras de Corea.

Yo creo que sigue siendo obras que traten este tipo de cuestiones y y, este, y autores que tratan este tipo de cuestiones siguen siendo también minoría, ¿de acuerdo? Por ejemplo, el otro premiado, se llama Tsuki Yubi, y su obra va, creo que es, Goet lo dijo todo. Goet, Goet, el el poeta alemán lo dijo todo. Y es una obra que es que, básicamente, son aforismos de Goet, es una cosa bastante más clásicota, digamos, ¿no? Entonces, tenemos estas dos realidades, ¿no?

¿Es realmente representativo de cómo va a ser de cuál es el futuro de de de la literatura japonesa? Yo creo que no, es decir, no estamos teniendo aquí un cambio de hegemonía. Lo que estamos teniendo es una una apertura a a una a una mayor diversidad, y sobre todo que se abra el debate a incluir este tipo este tipo de voces. Y en este caso, pues los premios permiten abrir como, por lo menos, generar la excusa para que salgan sobre estas cuestiones. Y el caso de de José Andaly es muy interesante también por eso, por esta voluntad de no querer hacer de su perfil personal el foco de atención, a pesar de que muchos periodistas van a ir a decir, oye, pero entonces tú

Van a eso, ¿no?

Sí, es decir, pero esto es este nombre y tu familia y este tal, ¿tienes tu madre de dónde es? Etcétera, etcétera, ¿no? Y decir, no, no, a ver, vamos a hablar aquí de de mi obra y de lo que vamos a a trabajar. Yo creo que este esta tensión, este conflicto entre entre la identidad personal de los autores y lo que quieran hablar, pues está en el centro de todo esto.

Bien, entonces, un poco también plantearnos si la literatura tiene que sí que hablar sí o sí de conflictos de identidad, o en este caso, la identidad del autor o de la autora no es tan relevante para hablar de temas de identidad y y se puede separar de alguna manera de eso, ¿no? Puedes hablar de una cierta herencia cultural a la que perteneces o a la que no, o puedes no hablar de una herencia en concreto de la que sí perteneces, pero no quieres que se, a la que no quieres que se escriba necesariamente tu obra, ¿no? De eso vamos a hablar un poquito bien en el episodio.

Así es, vamos a ver cómo está el panorama de lo que hemos llamado o lo hemos, lo lo estamos como limitando a literatura de Gaspar.

Bueno, en esto, yo creo que estaría interesante que que nos comenzaras contándonos un poco. Yo también pongo la oreja, porque hay hay como una parte de la narrativa de de la diáspora en Japón y sobre todo la diáspora coreana, que de alguna manera se estudia y yo creo que se se conoce mucho más de cerca desde los estudios japoneses o desde la o desde el estudio de la literatura japonesa, no en el caso en el que hablamos nosotros ahora mismo. Yo no sé de de la existencia de esta diáspora, no de de coreanos que se fueron a vivir a Japón durante un momento colonial y que luego se quedaron como separados. Pero, ¿cómo es esto exactamente? ¿Cuál es cuál es la cuál es el la cómo es la comunidad esta?

¿Cómo se configura? ¿Cuál es un poco su historia? Más o menos por encima, para que nos nos hagamos una idea.

Sí, yo creo que el el punto, quizá, de contacto entre entre nosotros, entre entre las las las literatura que trabajamos y este tema, uno de ellos sería la literatura Saint-Nichi. Que, básicamente, como comentaba, son aquellos son coreanos o descendientes de coreanos, como decimos. En el momento en que empiezas a decir, son coreanos, dices, hostia.

Claro.

Pero es que es es gente que ha nacido en Japón o que sus padres han nacido en Japón, que en muchas ocasiones es que ni siquiera han pisado han pisado Corea. Pero la historia, te la resumo, porque si no estaríamos aquí hablando un montón, ¿no? Pero claro, Corea fue colonia de Japón, fue colonia japonesa. Cuando Japón pierde la guerra y Corea se independiza, sucede que hay una gran por parte de la población coreana que vivía en el archipiélago japonés, que se le da dos opciones, o regresar a Corea o quedarse en Japón. Ahí hay un, claro, es un período un poco complicado, no solamente porque en ocasiones hay gente que ya llevaba en décadas en viviendo en Japón y habían establecido ya su vida y su trabajo, sino que luego sucede que, ¿a cuál de las dos coreas te vas?

Claro, aclaro, otro tema.

Entonces, hay una parte de, la gran mayoría de de los coreanos que viven en Japón se vuelven a al al a la península coreana, pero otras se, otros se quedan y se quedan en este espacio de limbo legal, al cual no se les admite que son ciudadanos japoneses. Se le siguen como asociados a Corea y se les da pasaporte. Es como que incluso tienes que escoger entre ser, como tener un pasaporte surcoreano o norcoreano, a pesar de que resides en en Japón.

Wow, qué fuerte.

Y esto durante un montón de tiempo.

Es más segregación muy fuerte realmente, ¿no? Es como no aceptar, en cualquier caso, ningún tipo de integración alguna, incluso gente que ya ha nacido allí.

Efectivamente.

Es un tema de herencia, básicamente, de herencia cultural, realmente es una segregación.

Es es una serie, hay una serie de problemas con esto, y muchos de ellos tienen que ver con también con la la

definición

increíblemente estricta que ha tenido siempre Japón con a quién considerar como un ciudadano japonés. Ah, sí. La diferencia entre ser residente, ser ciudadana, ya ni siquiera te estoy hablando aquí de de nacionalizarse

como en

el japonés.

Es otro tema.

Es otro tema total. La cuestión con de con con los Ainichi, que literalmente sean, pues los que se queden en Japón, es que es una condición que se hereda. Es decir, tú puedes haber nacido en en Japón, y como tus padres eran coreanos porque nacieron en Corea, en el período colonial, o como tus abuelos eran coreanos, que habían nacido en en Corea, en el período colonial, heredas este tipo de condición y sigues manteniendo el el el pasaporte coreano. Esta situación se se extendió, sobre todo, a lo largo de la segunda mitad del siglo veinte, pero se han ido pasando una serie de leyes para intentar regular el asunto, para permitir que se nacionalizaran los los los einichi. Lo que pasa es que ha llegado una situación, ha llegado un punto en el cual muchos de ellos, por rebelión incluso dicen, no, no, no, yo es que quiero mantener esta esta condición, porque lo que quiero un poco es romper la cáscara de de de la supuesta homogeneidad en Qué fuerte.

Luego

está el el barrio este coreano que hay en Tokio, que yo estuve un tiempo, no me acuerdo cómo se llamaba ahora mismo, que está todo lleno de tienditas de kpop y cosas así. Eso también tiene que ver un poco con una tradición fennichi, entiendo, ¿no? De de un espacio donde solían vivir comunidades coreanas, que se ha mantenido así.

Sí, la cuestión con con los fennichi es que están, claro, en en una situación de vulnerabilidad burocrática, como la que tienen, las comunidades se cierran.

Claro.

Se ayudan entre ellas y se dan apoyo entre ellos. Y para hacer esto, en muchas ocasiones, pues, hay un poco como de unidad, no sé si decirlo regional, pero de foundland. Muchas familias se terminan viviendo en en los mismos espacios, empiezan a trabajar también en los mismos espacios. Ahí hay, además, se genera mucho estigma porque, en ocasiones, sobre todo en los en los cincuenta, sesenta, empiezan a desarrollarse también, pues, ciertos negocios, algunos de ellos en negro. Hay una asociación también con con la criminalidad, que es minoritaria, pero que es muy visible, está muy visibilizada también por parte de los medios.

Esto de decir, no, es que los coreanos llevan los Pachincos, que son como los espacios estos de de, bueno, es la gran palabra.

Bueno, Pachinko, justo de Pachinko quería hablar yo, de hecho, porque Pachinko va sobre la la obra. ¿No? De de Pichinko. Yo he estado en un Pachinko, estuve en Tokio, pero esas cosas que entras un poco por curiosidad y luego te das cuenta de que es un ambiente.

Te aburuma todo el ruido que hacen porque es una cosa.

Son como unas tragaperras que salen entre tragaperras y pinball, así sin yo tener un poco ni idea de nada de esto. Pero realmente es un es un son tragaperras, venidas a más, no donde puedes jugar con unas bolitas y cosas así.

¿No? Sí, sí, sí.

Está un poco llena siempre de señores. También dependerá del sitio, pero los veo como espacios, eres como mini mini casinos, todo de maquinitas de distintas de distintas cosas, ¿no?

Que te abruman los sentidos, porque hay un hay un ruido muy, muy fuerte de la gente jugando las máquinas, la música, las luces, es todo. Realmente es un espacio también, pues, como tú dices, es de de de juego, ¿vale? De juego de azar, un poco así, medio amañadete, pero también es un espacio de casi de alineación sensorial. Es como que tú entras allá como para olvidarte de de de de de todo lo demás, de todo lo difícil que es tu vida fuera de ello. ¿No?

Es que esta esta obra que es Pachinko, que también ha tenido adaptación, yo creo que en serie, ha tenido muchísimo éxito y y es una obra que habla precisamente de los de los einichis, que aparece además en todas las listas de en todas las listas de éxitos de literatura coreana. La autora es Minjin Lee y y es esta esta historia de que van, estás hablando de un periodo como bastante importante, no de la de la de la de la historia coreana, más o menos reciente, no de historia coreana colonial. Pero claro, sabiendo cómo existe esta este conflicto con los Saint Izzi y este y estos problemas, el caso de esta autora es una autora nacida en Seúl, que que su familia se fue a Nueva York cuando era pequeña, es una autora que es otro tipo de diáspora, no porque es una diáspora coreana estadounidense que no tiene tampoco nada, nada que ver con esto, ¿no? Creo creo que habrá puntos en común, como todas las diásporas, pero luego es otra historia.

Aquí una realidad conflictiva, imperial

Claro, claro. La relación un poco con la metrópolis siempre es diferente, ¿no? De alguna manera. Y claro, sus padres tienen una joyería en Manhattan, que es el caso de esta autora, y estás hablando de Pachincos en Japón en el momento, en la época colonial, una historia familiar. Hay una, aparte de que es una obra originalmente escrita en coreano, perdón, en inglés.

Espere, a ver, a ver, entonces Pachinko. Sí. Estaba originalmente escrita en inglés.

Claro, porque es una autora estadounidense. Claro. De origen coreano. Ya nació en Corea, pero

ya.

Claro, a mí me viene a la mente y esto es una pregunta que tengo que plantearte, porque cuando cuando cuando estoy en clase y hablo de las primeras manifestaciones de literatura coreana, como la idea de entender la literatura nacional, que es la literatura coreana, me viene a la mente y Guang Soo, que es se podría decir que uno de los primeros novelistas de los primeros novelistas, aunque su obra luego ha caído un poco en en el olvido, por algunas otras cosas, es uno de los primeros novelistas de de literatura moderna, nacional coreana y tiene una una obra, aparte era un gran teórico literario, tiene estudió en Japón, estudió en la Waseda, de hecho, esto luego de vendrían otra serie de cosas y otra serie de afiliaciones nacionales complicadas. Pero antes de todo esto, él tiene una obra que se llama Munda Kiram, que es como qué es la literatura o sobre la literatura, en la que dice por primera vez que la literatura coreana tiene que estar escrita por coreanos en coreano. Y es una cosa que me viene mucho a la cabeza porque es muy restrictivo esta idea. En aquel momento era muy moderno, no es decir, guau, hemos hemos perdido.

Él decía mucho, hemos perdido muchísimos siglos escribiendo en chino, no que es una idea. De repente pensamos en literatura premoderna. Ahora la modernidad, esta idea también, esa recuperación nacionalista que estamos teniendo, no, finales del diecinueve, principios del veinte, que en Corea estaba intentándolo muy fuerte antes de que le hiciesen un sándwich un poco entre final de su relación de vasallaje con China y su comienzo de relación colonial con Japón. Este momento de oye, vamos a escribir en coreano y tienen tenemos que ser coreanos. Y estoy pensando precisamente en una obra como Pachinko, que a día de hoy es como hoy, mucha gente la identifica como gran obra coreana y no está escrita del todo por una persona que se haya creado en un contexto coreano ni está escrita en coreano.

Entonces, Jungsoo estaría como un poco rayado con esto, pero al mismo tiempo entiendo que es muy restrictivo. No sé tú cómo cómo entiendes esto. Sé que la literatura de diáspora es compleja, sé que no es tan sencillo como decir, sí es literatura coreana o no es literatura coreana, pero ¿tú dónde lo enmarcarías esto?

Es un temón, no es un temón todo esto. Yo, de hecho, las las claves de literatura japonesa les empiezo con este tipo de debates sobre, vale, vamos a intentar definir qué es literatura japonesa partiendo de de, como y temizándola o como como problematizando, que es es ella que está publicada en Japón, la que está escrita en japonés, la que habla sobre sobre problemáticas asociadas por con Japón y con qué qué qué cuáles son los conflictos que tiene que tiene Japón, entendiendo Japón, no solamente como el país, sino también como como la comunidad, etcétera, a la que está escrita por una persona que es japonesa. Que esto es a todas, cualquiera de estas definiciones va a tener sus agujeros. Yo creo que la literatura de la diáspora nos ayuda un poco en todo esto. Por lo que tú me estás diciendo, da la sensación de que realmente lo más importante es el vehículo, digamos, casi el texto, es una relación, es como algo muy textual, porque es, no solamente es escrito por un coreano, sino que tiene que estar escrita en coreana.

Claro.

Porque claro, si no dirías una posibilidad de todas a Inichi, que es porque están escritas por coreanos, según Japón, pero según ellos, algunos de los estos autores se identificarían como japoneses

Y escriben

¿Y escriben en japonés?

Claro, algunos ni ni siquiera hablan coreano ya, es un idioma que han perdido la

ellos, claro.

Claro, porque al final al final residen y viven como japoneses en un contexto lingüístico japonés. Sí, depende del momento histórico, claro, es el el japoneses en

un contexto lingüístico japonés.

Sí, depende

del momento histórico, claro, la realidad de los he inichi ha cambiado mucho, depende de de en estos últimos setenta setenta y cinco años. Hubo un tiempo en el cual iban, muchos de ellos iban a escuelas coreanas, todo se daba en en coreano. Y también era curioso, porque iban a escuelas algunos de ellos, escuelas norcoreanas. Guau. Imagínate, ¿sabes?

Escuelas norcoreanas en Japón, en un contexto de la Guerra Fría.

Sí, en un contexto completamente diferente o muy fuerte. Claro, también esto supongo que genera genera conflictos dentro de la misma comunidad.

Y en toda la misma comunidad y, claro, imagínate, pues, no no existe una experiencia homogénea de los einichi también, porque están los que son más. Entonces, lo que además pro Corea del Sur, lo que además pro Corea del Norte, todos ellos estigmatizado por los japoneses que Claro,

claro. Pero

claro, además está la cuestión esta étnica, sé que me estoy desviando un poco del tema, pero creo que es interesante, ¿no? Que está la cuestión esta étnica de, es que no hay forma realmente de distinguir en Japón.

Ah, no,

no, no, no actúa en esto. Entonces, muchos tíos sencillamente se cambiaron el nombre.

Ah, claro.

Y con ello, pues es como, pues

Porque tampoco hay un deje de manera de hablar en concreto necesariamente. No, no, no, no. Puedes puedes no tenerlo.

Pero si tú has nacido

en en en Japón y todo, claro.

Claro, no hay no hay ninguna forma de de de distinguirlo. Pero, bueno, la cuestión esta de qué es lo que Sería, siempre lo pienso, la la la literatura de Saint-Nichi es literatura del canon literario japonés, es literatura del canon literario coreano. Es de los dos. Porque, al fin de cuentas, lo que cuentan también es una experiencia de coreana. Es una experiencia postcolonial.

Es decir, esta gente realmente están teniendo una experiencia postcolonial. Una vez Corea se independiza de de como país, hay parte de de sus ciudadanos que viven en otros indios y que realmente están afectados por la realidad geopolítica, por la historia de de de la reacción de sus de de la colonia con la

metrópolis, ¿no? Claro, es que yo tengo ganas de que me hables de autores así, pero es que claro, yo yo sigo, yo sigo aquí en mi elemento de obras y autoras, autores que me dan rabia y quiero como canalizar el estudio usando este este episodio poco como terapia para canalizar esta rabia, sobre todo para darle forma, ¿no? Porque es muy fácil decir es que Pachingo no tal, ¿no? Claro, hablamos desde la identidad como, o sea, la identidad te te da la experiencia para poder hablar de un tema. Si existen personas que ya hablan de experiencia Zennnich, siendo Zennnich, teniendo esa experiencia, ¿por qué tiene que haber una persona que hable del tema sin sin serlo hasta cierto punto?

Pero es que esto siento que además se explota de una manera exagerada. Se me ocurre mucho también otra obra de la que siempre me hablan y me dicen ay, pues a mí me gustó mucho tal obra que es La isla de las mujeres del mar. No sé si la conoces, este

No, pero suena mucho a novela de aeropuerto. Bueno,

bueno, el take. La la Isla de las Mujeres del Mar va sobre las mujeres buceadoras en la isla de Jeju, que son buceadoras que hacen buceo a pulmón y es una tradición que existe en la isla de Jeju al sur de Corea de hace un montón de tiempo y tal. Ha habido muchos documentales y y, bueno, pues ya están como muy conocidas, no antes no eran tan conocidas, ahora ya se conocen mundialmente incluido en parte gracias a novelas como esta. Ahora bien, ¿quién escribe La isla de las mujeres del mar? Es una señora que se llama Lisa.

Sí, no voy a entrar en si está o no racializada, eso una búsqueda en Google y una búsqueda en sus en su historial familiar, supongo que lo resolvería. Pero es cierto que ya es la manera en la que se vende ella misma. ¿No? Ella dice que es la bisnieta del Patriarca de Chinatown de Los Ángeles.

La bisnieta.

La bisnieta. Es decir, es es una manera de presentarse, como autorizarse para hablar de temas asiáticos, porque esa señora lleva muchos años, muchas décadas haciendo obras sobre, bueno, yo veo muchas personas, muchas mujeres racializadas del este asiático en las portadas de las obras de esta de esta de esta señora, cosa que ya de por sí desde fuera me chirría, ¿no? Cuando tus propios libros tienen en portadas fotografías y dibujos de de una persona que no se parece en nada a ti, hay algo que ya de entrada me va chocando, ¿no? Y y así estiramos un poco más el chicle, llevas no sé cuántos años hablando sobre China, porque tú eres tu bisabuelo era x persona y ahora te pasas a Corea y hablas de las mujeres buceadoras de Yeju y tienes un best seller porque tienes todos los contactos y las el acceso al mundo editorial y el acceso al poder hablar de esto y convertirlo en un best seller, ¿no?

Esto me está sonando muchísimo a Yellow Face, a a la novela de

Ah, esa novela. ¿Cómo era esta esta novela?

Bueno, está está traducida como Amarilla.

Ah, vale.

Y, básicamente, va sobre sobre si es posible para una autora blanca escribir una novela que hable sobre cuestiones assette.

Ah, ese es un novelón. También va un poco sobre las intrigas dentro del mundo editorial.

Mucho, hablas, sobre todo, de las intrigas del mundo editorial estadounidense. Está muy bien. A mí, bueno, yo yo me la me la me la me la pulí enseguida, porque además tiene como este misterio detrás, un poco un poco misterio de asesinato detrás y la cuestión de la culpa, etcétera, que lo cruza

todo. Es que, la verdad, es que es interesante también que existan obras así como que desplieguen un poco, que que se hable de este tema. Entonces, bueno, estos son dos ejemplos que yo te pongo, que me parecen yo sin sin ser yo nada de eso, me parecen un cuadro. ¿Vale? Me parecen un cuadro y y yo aprovecho aprovecho esta plataforma para hacerlo, pero pero está bien que podamos matizarlo, quiero decir.

Si esto es un cuadro, podemos ofrecer una alternativa a las lectoras. Podemos decirle, oye, mira, esto quizás es problemático, sobre todo porque existen personas que sí pueden hablar de esto. Por ejemplo, hay alguien, tenemos a alguien.

Sí, claro. Yo creo que el, para mí, el ejemplo más paradigmático de lo que sería literatura Saint-Nici, también desde un punto de vista accesible en traducción, a pesar de que hay muy poco traducido en castellano a de de esta autora, es Yumiri. Yumiri es es escrita en Saint-Nici, y ella ella ha trabajado a lo largo de su obra cuestiones relacionadas con con con su condición Saint-Nici, además, con un con un background familiar bastante difícil. Entonces, hay una una serie de conflictos que atraviesan. Y es muy interesante, porque ella habla sobre eso sobre su realidad como personas hay Nietzsche y tal, pero no toda su obra va sobre esto.

Entonces, tenemos, por ejemplo, novelas como Gold Rush, que está, Gordudo Rashu, no sé, claro, que no va, que no está traducida, por cierto, Está portado cierto todavía. Pero que va sobre, tienes este chico que está perseguido, chicos de Iñishi que está perseguido porque, en principio, tiene que heredar el negocio de su padre, que es un negocio un poco turbio. Y es hasta qué punto realmente puede escaparse de esta de esta realidad cuando es un negocio más o menos como rentable, etcétera. O esta otra que me leí el año pasado, que es como es un es un un tocho tremendo, que es al final del el final del de agosto, como a fines de agosto, yo me la leí en en su traducción en inglés por Morgan Gilds.

Que se llama en inglés para que la gente lo pueda encontrar.

End of August.

Ah, sí, ese es el pedazo de tocho importante. Claro, es

que es esta novela épica y antológica que toca con un montón de temas asociados con con Saint-Seinisi, sobre todo, del período colonial, porque es ella la autora, intentando como comunicarse de forma un poco chamánica con su con su abuelo.

Que

que era, fue un corredor que iba a correr en las olimpiadas de Tokio de mil novecientos unas olimpiadas que no se celebraron. Por momento me meto en, no sé por qué no se llegaron a celebrar, pero iba a correr. Pero claro que pasaba, que el surcoreano iba a correr para Japón.

Claro.

En las olimpiadas.

Claro.

Y es toda esta idea de cómo me conecto y cuento la historia de su abuela y cuento la historia también de su tía abuela. Le cuento de la historia también de una vecina de de de sus abuelos. Y hace una épica saga familiar, en la que está hablando también del conflicto que tiene ella Ajá. Como autora en el Japón contemporáneo, para intentar conectarse con esta con con con estas cuestiones. Y reivindicar ese tipo de circunstancias y, al mismo tiempo, no verse clasificada por ellas.

Y es muy interesante también, porque luego pasó página como autora de esto, más o menos, es decir, no es como que lo dejara totalmente atrás, porque no es una condición en la que puedas despegarte del todo. Pero luego es como que empezó a relacionarse más después del triple desastre de dos mil once, para ponerte un ejemplo, con esto, lo del lo del tsunami, en Fukushima, en todo esto, en la central nuclear y tal. Empezó a relacionarse con los desplazados y los afectados por por este triple desastre, en Tohoku en todo lo que es el noreste japonés.

Es una autora muy interesante, ¿no?

Es un, a mí me flima, a mí me incrementa.

Como como quizás como como personaje, también no es interesante, ¿no? Que esté entrando ella en tantas cosas como su propia personalidad de alguna forma, ¿no?

Bueno, sí, de hecho, es que lo que hizo es mudarse, yo es que podía estar hablando un montón de tipos sobre yo, mi idea, lo siento, pero se mudó después del del triple desastre a Minamisoma, a un pueblecito afectado por el tsunami y abrió allá una una cafebrería, que es mitad cafetería, mitad librería. Que yo llegué a visitarla. De hecho, sí, con con mi amigo Matías Chiape, en, que sería hace un par, par o tres de años. Estuvo muy interesante. No estaba, queríamos verla, queríamos ir a visitarla, porque claro, ella está ya en en su casa también, pero estaba de viaje, de de investigación en, creo que era en Kioto para su próxima novela.

Guau. Tenemos también, creo que en castellano, porque estamos poniendo ejemplos que no pueden encontrar en castellano, pero de ella es también la de Tokio, está hacen de bueno.

Efectivamente.

Está publicado también en en castellano eso.

Sí, pero esta es, ya te digo que es, no es del

No habla sobre los Sanicis.

Habla sobre toda la cuestión del triple desastre. También es novela que me gusta

bastante. Vale.

Y está, está traducida también al tanto al español como como al catalán también está traducida.

Ah, mira, wow, interesante. Sí. La verdad es que, bueno, en el Legend of Ogust creo que fue interesante cuando cuando me la me la enseñaste, que me acuerdo que lo estuve ojeando, estuvimos viendo y todo esto, que precisamente también fue un poco de es otro de las obras como que nos unieron un poco para generar este proyecto de podcast. Pero yo recuerdo que así como me gusta mucho la premisa, es una obra que no le quise entrar y a decir que a nivel personal se me hizo un poco bola, se me hizo un poquito bola porque la vi como tiene como todo este diálogo interno, como que me pareció muy intensa la un poco, no sé.

Es un poco intensa tanto en la temática, porque es es habla de cuestiones bastante difíciles y tal, y luego, por ejemplo, el el personaje también de la de la vecina que decía, termina siendo esclava sexual al ejército japonés. O sea, esto, este este tipo de conflictos que además están muy cruzados, ¿verdad? También porque tiene unas decisiones lingüísticas un poco extrañas.

Eso, eso, eso es muy interesante, ¿verdad?

Como traductora, a ver qué te parece.

Me me fascinó eso, porque, claro, fue interesante y, además, creo que es un fondió algo muy, una conversación muy interesante que tuvimos, porque estuvimos echando un vistazo al original. Y recuerdo que el original había elementos que estaban escritos en coreano o como como transcritos, como era. Estaban transcritos en Katakana, pero realmente era coreano.

Claro, es una vela que está escrita en japonés.

Exacto.

Pasa que hay parte de los diálogos que lo que hace la autora es intentar transmitir que es coreano, pero no está escrito en Hangul,

está escrito

en Katakana. Exacto. Entonces, tú como lo lees en Corea, en japonés y lo estás pronunciando las palabras como si fuese coreano, pero en katakana. Claro. Lo que pasa es que está en furigana, que es como si fuese esta este Super Index, esta este, aquí pequeñito, que te dice el significado.

Entonces, tú como lector en japonés, lees y dices, si lo leo pronunciado, no entiendo nada, a no ser que sepas coreano. Pero como tengo aquí el significado, pues puedo más o menos seguir la trama.

Claro, pero, por ejemplo, en el libro, en la versión en inglés, que está bien, porque es un poco eso también, una cosa a la que yo le entro mucho y que le hablamos también en este momento, que era lo del derecho a la opacidad, no la capacidad de a una de estas ideas de de Glissart sobre la traducción que dicen que bueno, no tienes por qué entender todo. También forma parte un poco de los estudios coloniales, no de la de la decolonización de la traducción. El problema es que yo me di sí que explica lo que significa cada cosa de alguna manera. Entonces, en el texto en inglés yo me acuerdo que tú me enseñabas cuando estuvimos viendo esta novela y te pregunté a ver qué tiene, que estás leyendo la leyenda un poco, te lo eché un vistazo y decía como onma onma no sé qué, como que llamaba su madre o algo así, o o Harabothi cuando hablaba con su abuelo y decía como algunos elementos en coreano que están transcritos en inglés sin sin más. Entonces quedan flotando, es como elementos de coreano que quedan un poco sin contexto y frases enteras, de hecho, hay frases completas.

Yo creo que, a ver, yo lo, porque si yo a a la traductora Morgan Gilles en en en la, bueno, la seguida en la red que ya no se puede mencionar es en Duskaine. Yo creo que tiene una relación muy estrecha con con Yummy, y es posible que hubiese ahí algún tipo de

De interacción o decisión.

Y de y de toma de decisiones, yo creo que es una buena es una buena traductora.

Yo creo que sea una mala decisión.

Creo que, quizás, fue una decisión a nivel del otro lado, un poco difícil también de, o sea, generaba quizá, y esto ya es una opinión personal totalmente, quizá generaba mucha mucha

Distancia.

Mucha distancia, excesiva distancia, incluso.

No, sí, incluso en mi caso, que aún leyéndolo yo estaba, o sea, lo lees en inglés, que es la parte en la que originalmente estaba en japonés y aún leyéndolo, la parte que estaba en coreano no, yo lo estaba entendiendo, yo entendía la parte en coreano, porque por suerte la entiendo, pero aún así es como que como que dejaba un poco raro, no? Ahí es donde quizás haya haya personas que puedan leer la obra, que que bueno, que sepan que es una, es un elemento también de traducción un poco más experimental en ese sentido. Y y bueno, también es de de Taxi Express, no? Que es editorial que tiene también están estos valores muy interesantes sobre el tema de la traducción y y precisamente el derecho a la a la opacidad, no que no sea todo el rato una una desnudez cultural constante, sino la capacidad también de mantener ciertos elementos sin exotizarlos, que es lo importante.

Totalmente. Y estaba pensando ahora que estamos que estamos hablando de Yumiri y estamos hablando de cuestiones de de opacidad, exotismo y tal. Quería recuperar esta idea también de de de la autora de Pachinko, para ver qué es lo, si podíamos hablar un poco más como como punto comparativo, porque estamos hablando aquí de experiencia de los Zenichin en Japón y tal, pero tú lo has dicho al principio, ¿no? Que también está esta otra gran producción literaria y tal que tiene que ver con los coreanos en en Estados Unidos.

Sí. Y y sobre todo es como a mí la lo que me choca un poco a veces es la la recuperación de elementos tradicionales, lo que se entiende como elementos o momentos históricos tradicionales, porque dan tanto las dos ejemplos que te he puesto, tanto Pachinko, que habla de los Saint Izzi, como como la novela de la Isla de las Mujeres del Mar, que va sobre sobre, bueno, sobre la experiencia de las buceadoras de de las genio, las buceadoras de Jejuu, es como que hacen referencia un poco a lo tradicional, no? No? Pero creo que también hay maneras de hacerlo un poco mejor. Si pensamos, por ejemplo, en en Henry Kim, la autora de hierba es una autora que es coreana, que se formó como como dibujante, como como autora, con medios tradicionales, pero que luego también estudió en Francia y se formó también en el mundo del cómic.

Ella ha tenido también acceso a un a un a una capacidad de expansión editorial, gracias también un poco a la obsesión francesa por por la van de Siné, no? Pero al fin y al cabo, no solamente tanto que ya sea coreana, porque ella habla mucho de su experiencia. De hecho, uno de sus últimas obras Mañana será otro día, es una un rato bastante íntimo sobre la maternidad, sobre todo sobre la infertilidad, no dentro de de la pareja y la y las expectativas sociales. Habla mucho de de propia de sus propias experiencias, pero la hora que la que la como que la ha llevado un poco a la a la fama internacional, que es hierba, habla también de las esclavas sexuales, no de de Corea durante el período colonial. Obviamente es un período histórico y pero ella sí informó como periodista prácticamente, no pudo ir a la fuente.

Hay experiencias que aparecen en el libro que son de las mujeres víctimas de esta, de esta, bueno, de este proceso histórico tan traumático a nivel histórico y a nivel personal, no para la península coreana y para otros muchos sitios también de la zona del este asiático, no? Y y claro, sí que se observa que hay como una investigación al respecto y se trata con bastante, con bastante, bueno, con respeto, ¿no? Digamos, y que también parte un poco de su propio acervo cultural, de alguna manera. Entonces, yo ahí sí que veo un mayor respeto en esto. Y si hablábamos del tema de de los, bueno, de las historias coreano americanas, siento que todavía no hay tanta, no hay tanta narrativa, no hay tantas obras, tanta literatura que que que que se acerque a esto.

¿No? Se me ocurre mucho en el mundo audiovisual la película de Minari.

Ah, sí. Que

bueno, la la actriz, esta actriz como clásica coreana que se llevó un Oscar en el año dos mil veintiuno, fueron dos mil veinte y dos mil veintiuno dos años muy buenos para el cine coreano en el extranjero. Y cómo Minari habla un poco también de del de estos estos roles también un poco tradicionales encapsulados en una cultura completamente diferente, como es en la cultura estadounidense dentro de en el extranjero, ¿no? Fuera, fuera del entorno coreano. Pero pero quizás en narrativa no me viene, no se me viene a la cabeza ahora mismo un equivalente a a Yumiri, aunque seguro que lo sabrían, lo habrán.

Bueno, también es que esto es lo que hablábamos, ¿no? Yo que son, al final no está no no existe una experiencia de ¿no? Yo que son, al final, no no no existe una experiencia de diáspora, no existe una experiencia. Estamos hablando aquí de la diáspora coreana, no estamos hablando tanto de la diáspora japonesa, a pesar de que también tiene su su propia representación en el extranjero. Claro, estamos aquí obviando totalmente toda la literatura en Ikei, en Perú con Jose Watanabe, con con Hyoshiro, Gondoris Malomisato.

O en Brasil también, que también había había, no solamente días predisentendientes, sino también en el en el período de tiempo en el cual Japón, pues, tenía subcolonias en Latinoamérica, que esto es una cosa así. Además, territorios en ultramar, no tenía el mismo tipo de estatus que Corea, por ejemplo. Pero, bueno, también había una este tipo de producción literaria. Yo, al final, de lo que queremos hablar, o creo que lo que lo que lo que yo me quedo mucho con de de de esta idea y con la que de de que me gustaría como seguir dándole vueltas, es es este conflicto de, no solamente de quién tiene derecho a hablar, que esto quizá no no estamos aquí ni tú ni yo como para repartir carnets al respecto

No, la verdad es que no.

Sino de hasta qué punto podemos hablar de la obligación de hablar cuando formas parte de la minería y cómo se encajan ese tipo de producciones dentro de los cánones que están definidos por barreras nacionales. Si tú dices, no, es que tú hablas, ay, no es la de la literatura coreana, y yo le decía el de la literatura japonesa, ay, claro. La literatura Sainichi, ¿dónde se encaja? Porque realmente está en el espacio entre los dos. Claro.

Es una de las grandes capacidades que tiene la literatura de la diáspora, es problematizar este tipo de categorías y abrir el este tipo, y uno diría el melón, sino los distintos melones asociados aquí al campo de melones para poder redefinir y sentirnos incómodos, un poco recuperando aquí la idea de huir, ¿no? Del segundo capítulo, sentirnos incómodos en en definiciones estáticas. Esto es una gran capacidad que puede llegar a tener, no solamente la literatura de de la diáspora, sino también, bueno, la literatura, en general.

Qué bien habla este chico siempre.

Bueno, yo creo que, como para concluir un poquito lo que te quería preguntar, ¿qué opinas de cómo encaja en todo este tipo de conflicto? Sé que esto va sería un tema en sí mismo, pero ¿cómo cómo crees? ¿Qué qué idea se te viene a la mente cuando hablamos de literatura de diáspora, vamos a decirlo, del este asiático en España o en o en Latinoamérica?

Otro melón de los varios melones que estábamos mencionando. Sí, sí, creo que tengo muchísimas ganas de que aparezcan muchas, muchas más narrativas así. Creo que nos encontramos quizás en otro, en otra etapa con respecto a los ejemplos que estábamos viendo, no como que ahí está mucho más integrado todavía en España. Existen muchísimos prejuicios, muchísima exotización, racismo puro y duro también. Y y no sé, yo me encuentro en mi caso, no que soy profesora en Madrid, que hay una comunidad china enorme en Madrid y una de las comunidades chinas como más asentadas dentro de del territorio del Estado español.

Tengo muchísimos alumnos que son descendientes, descendientes y que que también estudian chino y que también. Bueno, también algunos que son alumnos míos también estudian coreano, ¿no? Y lo que pasa es que no tengo ahora mismo en mi clase, no he tenido recientemente nadie que sea de la de la escuela coreana, pero sí que como que veo todo esto y luego digo, madre mía, es es no correlaciona la realidad de de la la riqueza de la comunidad del este asiático en España, con luego qué es lo que llega a las estanterías o qué es lo que nos puede llegar las historias que nos consiguen llegar sobre esta realidad de la diáspora de, pues de China o de Corea o de Japón, por ejemplo, en España.

Yo pienso mucho en en en Jong Jo, en en Gazpachan y Dulce, ¿no?

Sí, Gazpachan y Dulce.

Que que, ah, me parece me parece una una una autora muy, muy interesante y que está, y uno diría, sí, es atrapada, pero que está muy marcada también por esta realidad de de de la diáspora. Y estoy pensando, está superbién que existan autoras como ella y que visibilicen y que rompan estereotipos, pero estoy pensando, joder, ¿cuándo ganará un un anagrama, una, con una novela que no tenga nada que ver sobre? Claro. Una una persona que es que es descendiente a la diáspora.

Exacto, un poco volviendo al tema de Yumiri, ¿no? Es como se parece que nos encontramos en un espacio en el que todavía hay que concienciar sobre el tema y hablar de las narrativas y que y que y que puedan escribir algo que no sea sobre eso también, sin que continuamente le pregunten. Por cierto, eres China, sabes? Es como que se pueda trascender y que puedan ser creadores de los temas que también les interese, no esto que la identidad no te obliga a escribir su identidad y al mismo tiempo te permite hacerlo si quieres. A mí me gusta mucho Gaspacho Aridulce también, porque además cruza mucho con con el tema del andaluz.

Entonces es como que habla de la minoría dentro de la minoría, no? Además, como que esta idea de qué gracioso que hay en la China que habla con acento Andalucía y ahí se cruzan muchísimos, muchísimos estereotipos diferentes, no sobre el tema de los acentos dentro de España, el tema de la realidad de la percepción de clase que se cruza con la percepción de raza en este caso, o de de origen de origen étnico. Entonces, es muy interesante también su su uso y tengo muchas ganas de ver qué más cosas va haciendo.

Esto ha sido Esta Por Leer, un podcast de literatura contemporánea de Asia Oriental. Si os ha gustado, ya sabéis, lo de siempre. Nos va genial que lo puntúéis positivamente en la plataforma donde lo estéis escuchando.

Os prometemos que, si lo hacéis, no vamos a escribir ningún libro sobre las buceadoras de Yeju.

Podéis seguir el podcast en redes. Estamos en Instagram, en TikTok y en Bluscay como arroba esta por leer, donde subimos recomendaciones o cositas que vamos encontrando y que nos resultan interesantes por si os apetece entrarle aún más a la literatura asiática u os queréis enterar las primeras de cuándo sacamos el próximo episodio.

Yo estoy un poco indignada porque he visto que en otros podcast sí que hablas en japonés.

Chao, chao.

Hasta la próxima.

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