El poder

Puede que este sea el mejor episodio que vas a escuchar nunca sobre el poder. Podría ser o podría no serlo.

Pero puede que te rías con él porque él puede. Querer es poder, y poder es power.

Esta descripción podría ser más poderosa, las cosas como son.

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En el episodio 156 de Planeta Cuñao. Bueno, venga, chavales, vamos a poner todo lo que hemos preparado para no pisarnos de cabrón a cada uno. Venga, yo he preparado un resumen de los tipos de pilas que hay. No, pero que no, que no es ese tipo de poder. Eh, yo he hecho como que no he podido, porque así hablamos de cuando no se puede. No, pero que no es ese poder. ¿Ah, no? No, no. Pues yo he mirado tijeras de jardinería.

Pero que, que es poder, no podar. Yo, Enrique, yo he ido al notario, pero guillo, era carísimo. Yo, mira, si lo pagamos del bote del Posca, vale. Digo, pero yo, yo solo no lo pago, ¿eh? Pero, mira, que no es ese poder. Pues yo he mirado grandes romances a lo largo de la historia. Pero, pero ¿eso para qué? Porque querer es poder. Powerful Teatrillo Ever Oye, que hoy os traigo grandes noticias para todos los conductores.

¿Te has comprado un coche nuevo, Enrique? No, hombre, no. Mucho mejor, que aunque ya hayan dejado de dar las ayudas del gobierno a los carburantes, ahora, si repostas en Carburantes BP con tecnología Active, acumularás 10 céntimos por litro en tu tarjeta MiBP. Uy, eso me interesa, ¿qué hay que hacer? Pues es muy fácil, te descargas la aplicación MiBP para tu Android o iPhone, te registras y cada vez que repostes escaneas el código QR de la aplicación, así de fácil.

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Descubre todo lo que te ofrece MiBP. ¡Querer es poder, eh! Buenísimo. Bueno, ¿qué pasa, chavales? ¿Cómo estamos? Empoderados. Aquí estamos porque podemos. Podría decir también que está... que unidos podemos. Unidos podamos. Esto me lo ha dicho mi hijo cuando le he dicho de qué grabábamos hoy. Dice papá, te diré que estáis unidos podemos. Digo, ¿cómo? La cantera, eh. Madre mía. Le decimos al dinero, disfrutemos mientras podamos, ¿no?

Sí, sí, es lo que creía yo que ibas a decir vos. Era el chiste que iba a contar Rafa cuando acabara la despedida. Sí, de hecho, yo he buscado otra alternativa. Además, literalmente, no está. ¿Quiere así o qué? La carita que ha puesto el pobre. Cagueto, no vale que te calles. Ya, venga, punto en boca. Bueno, pues nada, hoy vamos a hablar sobre el poder en todas sus acepciones, que es el poder, qué tipos de poder hay en una sociedad, político, militar...

Como también me ha preguntado mi hijo, ¿pero vais a hablar de superpoderes? Eso ya hicimos. Eso ya hicimos uno, ¿eh? De superpoderes. La palabra poder, fijaos, es una de las más empleadas en diferentes ámbitos de la sociedad. Tiene un montón de significados. Viene del verbo latino potere. Potere suena a casa de apuestas, ¿verdad? O algo así. Y tengo aquí apuntado, cuyo origen se encuentra en la expresión potest,

o sea, puede ser o es posible, que es de donde viene nuestro verbo hispano, poder. ¿Tiene algo que ver con potar? Creo que no. Puede, puede. Rafa va a decir puede en toda la frase que entre esta noche, ¿no? Es posible, es posible. Es posible. Entonces, pues eso, comúnmente, tener poder es que tienes la capacidad de hacer cosas. Los poderosos son los que pueden hacer cosas. Bueno, los que hacen cosas, o los que tienen la capacidad de hacer que otros hagan cosas.

Correcto, sí, señor. Te voy a poner un ejemplo, ¿vale? Con un tuit de arroba Kaledian. Dice, es maravilloso el poder de la música, que puede llevarte a otros sitios. Por ejemplo, en este bar está sonando Alejú Vago, así que me voy a otro sitio. Para que entendamos el poder. Perfecto el ejemplo, sí, sí, maravilloso. Bueno, en la sociedad, nosotros asociamos el poder a la autoridad, ¿no? Te voy a poner otro ejemplo.

Que después Bossa no lo explique, pero te voy a poner otro ejemplo. Yo haré lo que explica bien. Mira, te voy a poner un ejemplo de arroba Benson Cenora. Dice, estaba con el perro esperando a que se pusiera el semáforo en verde para cruzar. Una señora ha empezado a pasar y mi perro la ha seguido. He dicho un no muy autoritario y el perro... Y la señora ha envuelto a la señora. ¿Ves? Porque ese hombre con ese no ha tenido la autoridad,

así que la mujer vuelva también. El perro, nada más. Pero si tú lo explicas mejor, Bossa. Yo sí, yo voy a explicar. Voy a contraponer cuatro características del poder y la autoridad, ¿vale? Para que se vea claramente la diferencia. ¿A contrapoder? No, no.

Poder y autoridad. Contraponerlo, contraponerlo, no contrapoderlo. Estaréis todos de acuerdo cuando lo escuchéis, diréis, pues verdad, Bossa tiene razón. Menos Rafa, que me lo discutirá. Es posible, es posible. Entonces, Rafa, porque tú puedes. Porque yo puedo, porque yo puedo. El poder, mira, el poder se trata de una capacidad que una persona tiene o no tiene. Es decir, puede o no puede hacer que algo ocurra, ¿vale? Tú no serás gallego, ¿no?

Sí, sí, no, pero bueno, es así. Es lo mismo que la vida. O puede o no puede que no esté vivo, ¿no? Es así de general, es así de general. Es la definición de padrón. Que nos puede o no. Pero en contraposición, ¿qué es la autoridad? La autoridad es una habilidad para hacer que los demás sigan tus instrucciones, ya sean por convencimiento o ya sea por sometimiento al orden social que se considera avalado.

Te voy a poner un ejemplo, ¿vale? De mi amigo, arroba molo en secreto. Dice, de pequeño el mando de la tele lo tenía mi padre. Ahora, mis niños, la autoridad ha pasado por mis narices sin pasar por mí. ¿No? El bastón de mando, el bastón de mando. Lo de los niños no lo sé, pero lo de tu padre era autoridad. Eso era así. Segunda característica, el poder. Se puede ejercer a través de cualquier medio o mecanismo,

incluido la fuerza bruta. Mientras que la autoridad consiste en el reconocimiento de los demás del liderazgo de uno y por tanto es un sometimiento voluntario a tus instrucciones. Un rey, por ejemplo, ¿no? Un poco raro eso, ¿no? No, voluntario no. La autoridad es voluntaria por los cojones. Pero escúchame, no siempre tiene por qué acatarse la autoridad. Te voy a contar aquí una cosa de mi amigo, arroba acatacero.

Está bien que te sale, cabrón. Dice, ¿cómo se declara el acusado por los cargos de desacato a la autoridad? Inocente, todo es culpa del abogado. ¿Qué abogado? El que tengo aquí colgado. ¡Ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja! ¡Ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja! ¿Qué se puede decir, Caprián? Se ha llevado el episodio nada más que por este tuit, ¿no?

Me emociona un montón. ¡Ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja! ¿Habrá escuchado? ¡Ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja! ¡Ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja! ¡Madre mía! Bueno, un buen ejemplo, Caprián, un buen ejemplo. ¡Ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja! Seguimos, la tercera. He dicho cuatro y van tres, pero voy tan lento Poder, tercero, puede que consiga someter a los demás, pero, ojo, un dato importante,

puede que tú no aceptes esta subordinación, o sea, tú lo haces porque lo tienes que hacer porque no cabe más cajones, pero puede que no estés de acuerdo. La autoridad no. La autoridad cuenta con la subordinización, subordinación... ¡Ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja! Lo hago queriendo para que realmente yo se pronuncienlo bien. Sí, se ha notado. Subordinación voluntaria de los demás debido al reconocimiento del propio liderazgo.

Es distinto. Y el último, el poder no requiere ni de ley, ni de instituciones, ni de acuerdos sociales. O sea, yo lo hago porque puedo y a tomar por culo, me da igual. ¿De carajo has sacado eso, vos? Es un documento del siglo VIII o algo así, ¿eh? ¡Qué diario! Porque va a tener, se lo tiene de los apuntes, de los apuntes del instituto suyo. Yo creo que os estáis equivocando del tipo de poder que vamos a hablar después.

El poder es tener la capacidad de que los demás se comporten como tú quieras. Podría ser, ¿no? Es una acepción de poder. Hay otras acepciones. El poder eléctrico, el poder... Ya lo hemos dicho en el teatrillo, ¿no? Hay varias formas de entenderlo. Que quede claro que vamos a hablar de la parte filosófica del poder, no de la parte física, sino la filosófica. Entonces, habiendo sentado estas bases, vamos a hablar de qué tipos de poder hay.

Porque yo entiendo que habrá distintos tipos. Como os he dicho, puedes imponer por la fuerza algo, puedes convencer a alguien. Vamos a hablar, vamos a definir un poquito estos... Pues mira, Enrique, si quieres empiezo yo. Vamos a diferenciar por tipos de poder y yo voy a hablar del poder coercitivo, que es precisamente el primero que hemos citado, el del uso de la fuerza. El poder coercitivo es el poder que emplea la amenaza o la intimidación

para lograr que el otro acate una autoridad. Y que para eso se puede recurrir a medios físicos, sociales, emocionales, económicos, y que la coacción, además, no tiene por qué ser algo evidente. O sea, puede ser algo... Tú puedes ejercer el poder coercitivo y puedes coaccionar a una persona haciendo luz de gas, por ejemplo. Luz de gas, ¿qué coño es? Hacerte creer que no tienes razón en nada o que eres tan loco.

Pero además que hay un momento en el que tú mismo hasta te crees y dices, hostia, ¿va a ser verdad que estoy zumbado? Pues yo lo que harás otro luz de gas. Es la primera vez en mi vida que lo escucho. Mira que llevo vida, ¿eh? Pues eso, pues sí.

Como tampoco tiene que ser evidente, como estabas diciendo, la persona que es sometida a ese poder no tiene ni que estar siquiera al tanto de que está siendo sometida al poder coercitivo. ¿Vale? Que es lo que estaba diciendo Caprio. O sea, que te hagan pasar por loco, que estoy loco, estoy loco, estoy loco, y tú realmente no eres consciente de que te están haciendo eso gracias a este tipo de poder. Es que el poder coercitivo es el padre que le dice al niño, como no recojas esto, te voy a pegar una hostia que te van a enterar.

Y no tiene ni que haberle pegado nunca, ¿eh? O sea, claro, al final acaba recogiendo porque lo que no quiere es recibir la hostia. O el niño que sufre bullying, que tiene que hacer algo todos los días y se somete a los deseos de otra persona para protegerse por miedo a empresaria. Sí, sí, sí. Y ya llega el momento que lo hace de manera inconsciente porque dice es que haciendo esto no me van a hacer otra cosa.

Álvaro, te pongo un ejemplo a ver si esto está un poquito relacionado. Venga. Corrito con alfileres, pero ya me dices. Mira, este es un tuit de mi amigo, arrobaazulworu. Dice, el jefe de personal es el único que tiene autoridad aquí. ¡Potestad! Lo hacemos, pero le importan tres cojones. Bueno, el poder coercitivo, de hecho, es un poder típico del Estado. Es el que llaman el poder duro. La asistencia de los ejércitos, de la policía, es poder coercitivo 100%.

De hecho, ese tipo de poder surge precisamente de la tenencia en exclusiva por parte del Estado de las armas. Del monopolio de la violencia. Exactamente. ¿Qué ocurre? Que ahora vienen los países como Estados Unidos. Es que yo no quiero que el Estado sea… Tenga el monopolio de las armas. … que ejerza el poder coercitivo. Yo quiero tener 24 AK-47 en mi casa y las tienen. Para jugar. Eso es lo que ellos…

Vale. Literalmente, eso es lo que dicen. Sí, sí. Eso es lo que alegan. Exacto, eso es lo que alegan. Que como yo soy un individuo libre en mi país y demás, yo no quiero que el Estado pueda ejercer la violencia contra mí sin yo poder defenderme. Entonces, déjame tener armas. Entonces, es una manera de poder defenderse de este poder coercitivo ejercido por el Estado en este sentido. Los dos principales inconvenientes que tiene este poder coercitivo

desde este punto de vista, ¿vale? Es que el individuo que se encuentra sometido a él, en el momento en el que se dé cuenta y tenga la oportunidad, va a volar. Claro. En una dictadura, el individuo que se encuentra sometido a ese tipo de poder, en el momento en el que ve la oportunidad de salir del país, sale por patas. Sala. Y el segundo inconveniente es que requiere un montón de recursos para la vigilancia de que se cumplan las órdenes que tú das.

Sí, porque si no es como un concejal de Cuenca, ¿no? Que tú dices, bueno, muy bien, ¿qué poder tiene tú para ejercer la actuación? O sea, si te dicen, no, es que si no te pones la mascarilla, te voy a dar tres barazos, como hacían en la India. Sí. No te pones la mascarilla, te voy a dar tres barazos. Pero si no hay nadie controlando eso, la gente sale sin mascarilla. O si hay alguien que no te pone la mascarilla,

o si hay un tío para repartir tres barazos a doscientos mil, va a ser lo mismo. Entonces tienes que destinar muchos recursos al control, a hacer un sistema de vigilancia eficaz de las indicaciones que tú has dado. Pero este poder también se da en las empresas, no solo en el Estado, como el típico jefe que dice, que el fin justifica a los medios. Y aquí hacéis lo que dice mi polla y sois todos unos mierdas y no sé qué.

Unos vagos. A ti lo que te voy a hacer es ponerte una sanción porque eres un desgraciado y tal. Ese tipo de jefe. Y el que no haga lo que yo le digo está en la puta calle. Correcto. ¿Y eso qué tiene de malo? No, no. Si está definiendo el poder coercitivo. Claro, no estamos hablando de que sea uno malo. No, no. Que crea que me está violando de mí, que es que me he despistado un momento. Te estás definiendo quizás como un jefe coercitivo.

Estaba dibujando la Wikipedia. Se ha comprado un perro asesino, de hecho, para acofonar a los trabajadores. Un pasto alemán nazi. Con padre nazi, ¿eh? Padre nazi de Alemania. Oye, qué broma, ¿eh? Que yo soy casi más socialista que Rafa. Sí, sí, sí. Casi, casi. A punto está. Seguro, seguro. Poboja, si tú eres un jefe coercitivo, te digo ya que no vas por buen camino. ¿No? Para empezar, la dirección coercitiva lo que hace es coartar totalmente

la creatividad y la iniciativa por parte de los empleados. Porque al final, tú lo único que vas a valorar es la disciplina de decir que las órdenes que tú das se acaten y se hagan tal y como tú lo has dicho en una dirección clara y sin ningún tipo de negociación, ¿no? Es decir, tú no vas a escuchar que tus empleados te digan oye, es que yo creo que se puede hacer mejor. Por el miedo. Pues entonces, esas posibilidades de mejora no las vas a poder llevar a cabo nunca.

Qué maravilla. De hecho, está demostrado que la dirección coercitiva en el ámbito laboral es la menos efectiva de todas. De los tipos de liderazgo y de dirección que puede haber, este tipo es el menos efectivo, aunque hay momentos en los que sí es útil. ¿Qué momentos son esos? Cuando hay crisis empresarial, en la que los empleados pueden estar un poquito más díscolos. Ah, sí, sí.

Cuando hay problemas y no hay para cobrar, entonces sí, que mande el jefe. Claro, claro, claro. Se jodan. Pero tienen ese momento muy puntual. O al tratar de un grupo de trabajo con gente problemática o que ha tenido conflicto. O sea, como los romanos con los dictadores, ¿no? Cuando había problema, nombramos un dictador que nos arregle todo el problema y ya volvemos otra vez a la democracia un poquito más adelante. Yo estoy pensando aquí mucha gente.

¡Bofa, bofa! Voy a acabar ya una cosita ya breve. De hecho, en las escuelas del Reino Unido, desde 2020, se da una asignatura que es Educación para las Relaciones, en la cual se estudia el control coercitivo que puede ejercer una persona sobre otra, para evitar casos de abuso doméstico o de bullying en las escuelas y demás. Y se habla de cuáles son los comportamientos coercitivos que suelen tener las personas.

Cómo aislarte de tus amigos familiares, privarte de necesidades básicas, controlar el tiempo de la otra persona en pareja, por ejemplo, despreciarte repetidamente. Esas son medidas de control coercitivo que ejercen los abusadores domésticos. Yo voy a hablaros del poder de recompensa, que para los que tengáis perritos como yo, eso se usa mucho para enseñar lo de la patita y estas cosas, ¿no? Es que es muy importante que un perro sepa dar la pata, ¿eh?

Eso es fundamental. Y decirle ¡pium! Y que el perro se tenga ahí en boca arriba como si estuviera muerto. Eso es lo segundo más importante que existe. Las dos cosas básicas en la crianza de... Exactamente. Sobre todo lo del ¡pium! Lo del ¡pium! me ha encantado. Así, pero con las manitas así como...

Con el gatillo, tiene el gatillo. ¡Pium! Y el perro se tira boca arriba. Eso es fantástico. Tú sabes lo que vacila uno en el parque con eso. Este tipo de poder se basa en la capacidad que tiene la persona que lo ejerce de satisfacer o recompensar a otra persona o perrito con incentivos positivos, con el fin de conseguir aquello que quiere. Por ejemplo, a mí Pablo. Pablo, por favor, estudia.

Pablo, hijo mío. Pablo, que has bajado la escalera siete veces esta tarde. Por favor, estudia. Y al final te mira. Pablo, si apruebas, te compro un iPhone. Te compro un jefe. Por ejemplo, como nuestro amigo el sociata, como nuestro amigo el Rafa. Oye, Rafa, que si esto te le trabaja dos días en vez de uno, o si tal, te haciendo y ganas más dinero. Eso es poder de recompensa. Eso es lo mismo que la chavala esta, que llegó a su casa y le dijo a la madre

«Mira, me ha dicho un hombre en el ascensor que si le chupaba la p*** le regalaba este reloj». Es algo así. Es ejercer poder mediante una recompensa. ¡Qué vasto que eso es! ¿Cuál es el problema? La recompensa tiene que ser percibida por el otro. Si lo digo, Pablo, si estudias te compro un paquete de pipa. Pues, madre mía, un muerto un paquete de pipa. Quiero yo un paquete de pipa. Y después, si tú lo ejerces continuamente con la misma persona,

la recompensa cabe, tiene que ser mayor. Porque si siempre ofreces lo mismo, en un momento deja de tener atractivo. Porque ya te desencanta un poquito y deja de tener esa influencia. Que también pasa con los perretes. Hay que tener cuidado con eso. Mira, Bocea, perdona.

Yo era en la universidad, me acuerdo que explicaba que había profesores que empezaban el curso diciéndole a todos los alumnos tenéis todos un 10. En vuestra mano está mantenerlo. Igual que otros profesores te dicen, tenéis que aprobar y tú tienes que ganarte el 10. No, el 10 ya te lo regalo yo. Y partían de esa recompensa. Entonces, en ti está de no dejar de hacer los deberes. Si tienes un buen comportamiento, si estudias, ese 10 lo vas a mantener.

Y eres tú mismo el que está rechazando la recompensa y eres tú el que está rechazando conseguir un 10. Perdóname, caballito, eso es una gilipolle. Sí, bueno, pero... Porque le podría haber dicho, empezáis todos con un 0. Todo lo que tengáis de deberes que hagas, del examen y demás, podéis llegar a tener un 10.

Estamos en las mismas. No, no, no lo mismo, no lo mismo, Álvaro. ¿Cómo que no? Hay gente que cuando se encuentra en una situación de... Se gestiona de manera distinta. Sí, claro, hay gente que cuando ve que no está aprobado, es que yo esto no lo voy a aprobar. Uf, es que las mates, imposible, yo no voy a aprobar las mates, papá. Si tú le dices al niño, tú tienes un 10 en matemáticas, bueno, papá, yo ahora mismo tengo un 10, así que yo lo que voy a intentar

es mantener... Claro, porque ha puesto bien la fecha de hoy. Ya no voy más, por si acaso ya no voy más. Si el niño haga dos cosas mal o no entrega un ejercicio que no ha sabido hacer, no va a tener 10. Cada niño necesita un método de enseñanza diferente. Por desgracia, en un cole se suele hacer el mismo método para los 30 niños y después va como va. Todo lo que sea con relaciones personales, pasa lo mismo.

Aquí hay gente que funciona con recompensa y gente que funciona bien con amenaza y gente que funciona bien con coacción. Totalmente de acuerdo contigo. Y en desacuerdo con Rafa, aunque no haya hablado en esta parte. Pero se le ve por donde va, se intuye. Hemos hablado de ejercer el poder, hacer que otras personas hagan lo que tú quieras o que pase algo, según tus propios deseos, solo porque eres capaz de ejercer violencia

como respuesta a consecuencias. Si eso no pasa, es el poder coercitivo. El poder de recompensa es todo lo contrario. Puedo modificar tu comportamiento, el comportamiento del grupo, de personas o lo que sea. Gracias a que tengo la posibilidad de ofrecerles una recompensa, ahí hay un poco más de poder. Y hay otro tipo de poder que os voy a hablar yo, que es el poder legítimo. Que es el que vale. Es el que ha permitido que las sociedades se desarrollen

y vivamos en algo parecido a las democracias plenas que tenemos hoy en día en buena parte del mundo. Es el poder legítimo. En la Arcadia Feliz, como dirían en el libro y directo. La Arcadia Feliz. No, no, no. Tanto como Arcadia Feliz, no. Pero la base es que un grupo de personas, en un momento dado, se puede hacer algo. Pero la base es que un grupo de personas, en un momento dado, se ponen de acuerdo para organizarse y otorgarle

a una persona o varias personas, a un grupo de personas, la capacidad de ejercer poder sobre el resto. Y ese resto de personas asumen en esa especie de pacto social, digamos. Reconocimiento. Asumimos que hay una persona que va a mandar sobre nosotros. El caso más típico es el de un político. Un puesto de autoridad. Un alcalde. El alcalde que está ahí porque la tiene más grande que nadie, porque lo ha puesto Dios ahí.

No, simplemente porque entre todos nosotros nos hemos puesto de acuerdo para que las personas que así lo decidan se puedan presentar, se les vota y a partir de ese momento se les delega una autoridad y un poder que puede ejercer, digamos, contra nosotros, incluso si no cumplimos las leyes y esas cosas. El ejemplo es la democracia. Por poner un ejemplo más claro de esto, Luis XIV tenía poder y mandaba y tal.

Todo el mundo le daba autoridad de que les mandara hasta que dejaron de dárselo. Y cuando le dijeron a todo el mundo que tal, el poder que tenía se fumó. Se quedó en Bragas y ya está. Enrique, porque no era reconocido como la autoridad por el pueblo. Él tenía un poder legítimo y de repente dejó de tenerlo. Bueno, legítimo.

Era un poder absoluto, claro. Un poder dictatorial. ¿Qué mola es el poder legítimo? ¿Qué es el más sano de todos? El poder bueno es el que os voy a contar yo, que es el poder de referencia. También conocido como información. También conocido como influencia. Yo os voy a hablar del poder de referencia tal y como lo entiende todo el mundo, aunque en algunas fuentes se habla también del poder de referencia, lo voy a mencionar brevemente,

porque también me parece una forma de poder, que también se puede ejercer poder de referencia por estar cercano al poder directo. Es el caso, por ejemplo, de los amigos, de los cercanos a los políticos. El enchufismo, que también se puede entender aquí. El enchufado del jefe. El enchufado del jefe. Por ejemplo, que hace 27 años salió el primer caso gordo de corrupción de nuestra democracia, que fue el caso Juan Guerra

con tráfico de influencia. ¿Recordáis? No sé si recordáis aquel caso. Se llevó por delante Alfonso Guerra. Otro ejemplo que se me ocurre, por ejemplo, es el PNV, que tiene mucho poder porque se junta siempre con el que gobierne. Por ejemplo. Vamos a hacer alguna referencia. Lo interesante del poder de referencia, de la influencia en este caso, es un tipo de poder que depende de los grupos a los que pertenecemos y cómo ejercen algunas personas

un rol de liderazgo dentro de este grupo. Sobre todo estas personas que son las que ejercen el poder tienen una capacidad de influir en los demás y son los líderes. Esto depende mucho de las cualidades personales de cada líder o de la persona que en este caso es el líder. Lo principal que se mira siempre dentro de un líder es el carisma que tiene y cómo se muestra como ejemplo ante los demás y hace que los que pertenecen al grupo

quieran parecerse a él por comportamiento, por capacidad, por ejemplo. Es un tipo de poder suave, no está relacionado con los que habéis contado antes, con el poder coercitivo, un poder suave que se basa sobre todo en la confianza y en la democracia. A diferencia de los otros poderes que habéis contado antes, hay distintos grupos en los que se puede ejercer un liderazgo. El que más nos puede sonar es en un grupo de empleados.

Siempre está el jefe, que puede ser un poder coercitivo, pero si este jefe realmente lo que ejerce es un liderazgo y no emplea, digamos no hay que hacer las cosas por cojones o porque yo lo digo, pues entonces esto está demostrado que reduce mucho la ansiedad de los componentes del equipo e incluso por ejemplo en grupos de trabajo esto hace que se reduzca muchísimo la rotación de los empleados, más o menos simplemente porque quieren trabajar

con una persona que ejerce liderazgo sobre ellos y no una imposición. Un ejemplo de este liderazgo sería una líder admirada y respetada por su subordinado y que la ven como un modelo a seguir. Capri, eso sería más el meme ese que hay típico que se ven los dos tipos de jefes, uno que están como un montón de trabajadores tirando de una piedra y él sentado en la piedra dando latigazos y el otro tipo de jefe que es el primero que está tirando

de la cuerda de la piedra. Yo de hecho, para que esto no quede tan teórico ni nada y para que además nuestro amigo Moza pueda aprender un poco y que deje el modelo coercitivo por un modelo más de liderazgo le voy a dar ocho consejitos. No uno ni dos, sino ocho. Sí, muy breve. Capri, ¿este poder es el que ejercen los youtubers y cualquier tipo de influencers sobre los chiquillos de hoy en día a través de redes sociales?

Sí. No, no, pero sí tiene razón Álvaro. El poder que puede ejercer un youtuber, un influencer ejerce un poder de referencia porque es un referente para ti, totalmente. De hecho, el nombre viene de ahí. Y me da coraje ahora mismo no haber caído en eso para hablar de esta parte. Pero muy interesante. Voy a dar ocho breves consejitos para que podamos aprender a desarrollar el propio poder de referencia porque no hace falta.

Punto uno. Escucha más de lo que hablas. Estamos acostumbrados a que el que ejerce el poder coercitivo habla mucho y tal, y sin embargo un líder suele escuchar más de lo que habla. El liderazgo de referencia significa aprovechar todas las oportunidades para escuchar lo que tus empleados o las personas de tu grupo tienen que decir. Se sienten parte del grupo. Un líder no es más que un componente del grupo

que ejerce un liderazgo. Pero es parte del grupo, no lo ven como fuera del grupo. Eso ya vocea por ahí mal. Confía en tu equipo, no microgestiones. El poder de referencia en el liderazgo significa empoderar a tu equipo, ayudarlos y guiarlos. Sí es necesario, pero sin supervisar cada paso que dan. Capriá, voz ha escuchado empoderar y ya ha dicho feminazis. Confía en los demás. Tres. Para mí es lo más importante.

Predica con el ejemplo. El poder de referencia en el liderazgo significa tener la capacidad de cultivar el respeto y la admiración de tus seguidores de manera que les haga querer ser como tú. O sea, tú tienes que ser un ejemplo en todo momento. En otras palabras, el poder de referencia es eso, es predicar con el ejemplo. Cuatro. Voza, importante, apúntatela, apunto cuatro. Colabora en lugar de dar órdenes.

No le digas al perrocito. Le empuja con las manitas en el culo para que se siente. Cinco. Estad abiertos a nuevas ideas y comentarios. Tienes que dar la bienvenida a las ideas de tu equipo. Solo lo que te tengan que decir, lo que tengan que proponerte. Es un win-win. Esto siempre va a ser positivo para ti. Pero que por un guido entre y por el otro sale. Esto sí que se dice. Me imagino a Álvaro dirigiendo un equipo

y un trabado de eso. Álvaro, he tenido una puta mierda de idea. ¿Qué te ha hecho pensar que me interesa? Eso es algo que para liderar un grupo jamás puedes hacer. Jamás. Aunque sea una puta mierda. Te callas, haces así, mires para otro lado. No puedes hacer eso, aunque sea una puta mierda. Voy a mear. Pasemos a la siguiente idea, por favor. Punto 6. Anima y felicita a tu equipo. Algunos líderes cometen errores, da por sentado.

Buen trabajo de su equipo, da órdenes o críticas. Nos acabas de costar dos millones de euros. Gracias a tu equipo por tu buen trabajo. Parecía tonto, parecía tonto. Acabas de reafirmar que lo eres. El jefe tiene que ir vestido de shit leader. A la empresa. Y con una camiseta de Paulo Coelho. Coelho ahí. Boza, punto 7. Interésate en tus empleados. Son personas reales. Tienen alegrías y problemas en su vida real.

Hay que interesarse en qué es lo que les preocupa. Le pregunto por qué coño ha llegado tarde. ¿Cómo estás, Juan? No, es que mi madre, que me suda la polla. ¿Qué coño te pasa? Y punto 8. Juan, Juan. Y alegra la cara. Que se me ha muerto mi madre. Que eso no me importa, que alegre la cara. Que espanta a los clientes. ¿Por qué ha llegado tarde? Que no me importa. ¿Quién coño te ha preguntado? Tú, que no.

Un líder nato. Boza me dice que ha llegado tarde. Es que se ha muerto mi madre. No te he preguntado por qué. Y alegrame la cara. Suavete esos mocos. Venga. Al final todas las conversaciones se acaban con este tonto. Este tonto. Y Boza, para terminar... Para terminar, punto 8. Estate del lado de tu equipo. Puedes encontrarte en desacuerdo o incluso en conflicto con alguno de tus empleados y tu cliente. Pero en estos casos, que nunca son fáciles,

haz todo lo posible por mostrarle a tus empleados que los respalde, aunque después, por lo que sea, no le de la razón a ellos. Pero intenta en todo lo posible estar de su lado. Aunque después lo despidas. Y estos son algunos consejillos que puedes ir aplicando. Pues ya me lo he apuntado para no hacer ni uno de yoga. No esperaba menos de ti. Hay otro poder, por aquello de la casualidad que me ha tocado a mí,

que es el poder experto. Madre mía, qué casualidad. La casualidad. Pero perdóname, Caballeto, es que se me ha olvidado interrumpirme a mí mismo para decir un tío. Ahora que he hablado de liderazgo, digo uno de arroba tiro de gracia. La guardería José Bretón, Diego Armando Maradona. La guardería José Bretón. Autoescuela Ortega Cano. Curso de liderazgo Albert Rivera. Impresionante. Qué cabrón. La guardería José Bretón

se ha pasado. Se ha pasado. Se ha colado. Otro poder podría ser el poder del experto. Un poder que se basa en el nivel de conocimiento que tienes. Un ejemplo. Había escuchado una vez decir que para tu convertirte en experto de algo necesitas las famosas 10.000 horas de haber practicado algo. En cambio, en las empresas tenemos gente que nosotros consideramos expertos y que no tienen 10.000 horas de experiencia en un campo, pero en cambio,

el equipo en total, se los reconoces. Y muchas veces sin importar el cargo que ocupas, hay un compañero tuyo que dice que es un experto. ¿Por qué? ¿Cómo otorgamos esa capacidad, ese poder? Porque ahí ni el jefe te está coaccionando. En muchas empresas tú haces una cosa y ya eres el experto de esa cosa para siempre. Fuiste el que cambiaste el cartucho de la impresora y tú eres el experto de impresora.

Para siempre. No, no, experto de impresora no. Eres el informático de la empresa. Si alguien llega para cambiar cartucho y la impresora sigue funcionando, automáticamente eres el director de IT. ¿Qué se llama ahora? Evidentemente sí que podemos reconocer que el poder de los expertos quieras que no implica contar con algo de experiencia en ese campo. Nadie va a ser un experto porque lo diga. Este es el experto cuando nadie

no tiene ninguna experiencia. El poder del experto no está ligado directamente con la posición de su trabajo. Hay expertos que no tienen por qué ser jefe. Porque hay gente que puede que no tenga un poder de liderazgo, pero sí tiene un poder de experto. Esa persona se explica como el culo, pero es que no hay nadie que sepa cómo hacer la función o la tarea que sea dentro de esa empresa. Lo tuyo con los bichos, ¿no?

Lo mío con los bichos, por ejemplo, que estoy solo. No tengo el poder de liderazgo, pero todo el mundo me viene a preguntarme cuando tiene dudas sobre un bicho. Hay maneras de desarrollar ese poder de experto. Yo creo que sí que soy muy especialista porque tengo una gran habilidad, un gran conocimiento de poder, ¿no? Así que, lo mismo que ha hecho Capria, vamos a dar unos pequeños consejos para ver, para tú mismo despertar ese poder que tienes en ti.

Como Rafa de presidente del club, como lleva toda la vida de presidente del club, es porque es experto, no porque tiene capacidad de liderazgo ni nada, sino por la edad que lleva y porque nadie quiere serlo. Efectivamente. Mira, por ejemplo, antes de desarrollar un poder de experto, lo primero que debes determinar es precisamente eso, cuál es tu especialidad. Yo puedo intentar ser experto en flequillos, pero es que de flequillo tengo un tobogán de carne.

O sea, sería absurdo ponerme yo a discutir un campo que tengo muy poco conocimiento. Vale, ya tengo claro que yo en esto, oye, pues esto se me da bien, pues yo voy a intentar convertirme en un experto para tener poder dentro de este grupo empresarial. Lo primero que tendría que hacer, evidentemente, es aprender de otros expertos, conocer el nivel que tienen otros expertos para decir, vale, eso es lo que ellos llegan a conocer,

pues yo también quiero llegar a ese nivel. Una vez que ya detectas en qué eres bueno, has aprendido de los mejores, lo siguiente sería compartir tu conocimiento, compartir tu experiencia. Pero claro, eso hay que hacerlo con un poco de pericia y de estrategia. Porque al final, si vas regalando tu consejo y conocimiento a cualquiera, al final tu conocimiento lo dispersas sin focalizarte hacia ti ese poder.

¿Qué pasa? Que también, por supuesto, antes de ponerte a presumir de lo que sabes, como era cualquier cuñado, debes estar seguro de tus conocimientos. Eso que te permite que cuando tú hablas delante de un grupo de personas que te van a hablar con confianza, dices, hostia, cómo dominan notas.

Pues yo la próxima vez que necesite ayuda en este tema, le voy a preguntar a él porque, cabrón, es que parece que hoy lo he explicado, ¿no? Cómo se nota que domina el tema. Ya sabes las cuatro palabras justitas de ese tema, pero la idea es que no sea así. La idea es que realmente ese tu poder como experto te requiere también de estar al día del campo de donde tú eres un experto. Evidentemente, tú sí, tú eres un monstruo

de los blogs, como dice Deboza, pero el que los blogs se pusieron de moda hace ya 10 años. Si no te ha modernizado, pues ya ni pincha ni corta en Internet, por ejemplo. Pero, ¿qué pasa? Algo básico para cualquier experto. No puedes perder tu credibilidad.

Y eso mucha gente, por desgracia, por tener mayor atención, por tener más visitas, más seguidores, son capaces de publicar cualquier mierda. Eso es como el poder que tenía el tipo este que puso un sarsichón diciendo que eso era mal. Tenía poder de experto total porque todo el mundo se lo trajo.

Si ese hombre pusiera en riesgo su credibilidad, perdería ese poder como experto. Es el tipo este que llega a publicar las chuminas que hemos visto durante toda la época de la pandemia. Y ese señor que tenía un poder... Ahora te pregunto yo respecto a esto, Caballeto. Porque además justo iba a poner yo el ejemplo de Miguel Bosé, que más o menos era una figura respetada y de repente suelta una pamplina, pero el poder experto que pudiera tener

sobre el campo musical, que era lo suyo, ¿lo pierde por hablar de una cosa de la que no maneja, como es la medicina? Eso te puede pasar en cualquier artista que en su vida, fuera de los libros, del teatro, de la música, comete un acto fuera de lo correcto, directamente se le censura. Tú dices, no, a mí me da igual lo que hiciera en su vida particular Picasso, yo es que soy un admirador de su obra.

Pero hay momentos en que llega a hacer algo que directamente hasta consigue que su obra pierda interés o pierda valía, que eso por desgracia... Y, por ejemplo, en el mundo de la empresa, el que decimos, el típico que sabe de una cosa en concreto, de informática o de lo que sea, porque sea sevillista pierde credibilidad, por ejemplo. Absolutamente. Pero si se emborracha en la cena de empresa, a la vuelta de las vacaciones ya no le miras tú con el mismo...

Ya no desprestigias ese poder, ya no tiene tanto poder porque el mismo lo ha perdido desprestigiéndose. En el caso de Miguel Bosé que has dicho, es que la opinión de Miguel Bosé sobre temas que no sean musicales a nadie debería de importar. Por eso digo que, en realidad, el poder experto es un poder que se da sobre un campo concreto de conocimiento. El que tú hables una pamplina de otro campo de conocimiento no debería afectar

y, sin embargo, afecta. En una rueda de prensa le preguntaron a Jürgen Klopp, el entrenador de Liverpool, sobre el tema y dijo que más os da lo que yo piense, si no tengo ni idea. No tengo ni puta idea. Tú eres entrenador de fútbol. Te puedo decir cualquier cosa, pero qué más os da si es que no... Y es verdad, pero todo el mundo opinaba del COVID, todos los famosos... Pero el problema es lo que decía antes Álvaro,

y es verdad, que Klopp sí podía ejercer el poder de referencia. Sí, sí, podría haber dicho cualquier disparate. Hacer un referente para muchas personas. Por eso es tan importante que la gente sea capaz de decir, no, yo de esto no sé. Por eso mismo que acabas de decir, cuando antes habéis hablado del poder de los influencers, yo lo metería más en el poder de referencia, perdón, en el poder experto que en el poder de referencia.

Pero es que expertos no son... No tiene por qué ser experto en nada. Un influencer no tiene por qué ser un experto. Es que no estamos ciñendo a expertos, pero es que la descripción que ha dado Caballeto no habla de expertos exclusivamente. Hay youtubers de temas específicos. El Jaime Altozano habla de música. Obviamente se tiene un poder experto en música. Hay otro tipo de youtubers que son y que realmente no hacen nada en particular,

tipo Ibai, que hace muchas cosas, o el Chocas, o un tertuliano de la cadena Ser. Lo típico tertuliano que opina de todo. El que realmente no puede scientificar como algo particular, pues sí que tendría el poder de referencia, porque solo sería que les tomas de referencia porque piensas que son gente muy sabia o muy, no sé cómo decirlo. Vale, sí, sí, sí, te lo compro. A lo mejor, si te lo llevas al mundo de la empresa, ¿no?

Tú sabes que hay un tío que hace lo que le sale de la p***. La empresa entra cuando quiere, sale cuando quiere, hace lo que le da la gana, no está sometido a las normas, solo porque es el único que sabe manejar una maquinaria. ¿Ese puede ser un poder experto más claro? Sí, para mí sí. Te digo un ejemplo de qué podría utilizar ese poder experto. Poder experto podría servir, por ejemplo, para motivar.

¿Por qué? Porque tú ves a una persona, a un grupo de trabajo, ves a alguien que tiene un problema, tú, como experto, ejerces ese poder y le dices, mira, ves que lo que estaba haciendo, podrías hacerlo de tal manera. Es muy tonto, ¿no? Un pedazo de mongolo.

Eso le da más herramientas a esa persona y se siente con más seguridad y aumenta su motivación. Pero eso es lo que estaba hablando Sergio antes. Ahí estaríamos hablando del poder de referencia. Bueno, claro, es que es muy parecido, pero esa referencia puedes hacerla. Claro, estamos hablando de motivar personas, de no motivar. Al final estamos hablando de gente que ejerce un poder, que es capaz de modificar el comportamiento de otras personas.

No estamos hablando, en verdad, de liderazgo, ni de motivación, ni de cosas así. Al final estamos hablando de una persona que es capaz de tomar decisiones por sí misma que afectan al comportamiento de otras personas. Te voy a decir yo un tuit del poder experto. De arroba aquel coche. Hola, estamos con el doctor en ingeniería Jan Sorenson, autoridad mundial en sistemas de retención infantil y creador de la sillita para coches

con el sistema LSP AirProtect. Díganos, doctor, ¿en qué consiste este sistema? Pues es un cacho gordo de goma espuma. Gracias, doctor. ¡Jajajaja! ¡Jajajajaja! ¡Jajajajaja! ¡Jajajajaja! Al final era un fraule, el hijo de puta. ¡Jajajajaja! Yo voy a hablar del último tipo de poder de este programa, que es el poder informativo.

Dicho así, es una cosa que hoy en día está... El cuarto poder, ¿no? El cuarto poder, que se le suele llamar. Estará ejercido por Pedro Piquera. Muy en boga, sí, el cuarto poder. La prensa es el poder de... Pero realmente, pensamos en la prensa, pero no solo lo tiene la prensa esto, porque es el poder que tiene la persona que tiene la información que otro puede necesitar o querer, por el motivo que sea. La información es poder, ¿no? Eso siempre se ha dicho.

El ejemplo más claro es la prensa, que por todo su sabido llamarlo el cuarto poder es porque está el legislativo, ejecutivo, judicial, y la prensa, que es capaz de poner y quitar políticos solamente... Oye, Enrique, esto del cuarto poder que le atribuimos siempre a la prensa, todos sabemos que es una expresión hecha, pero te voy a explicar de dónde viene. Hay un famoso escritor y filósofo escocés llamado Thomas Carlyle,

que tiene nombre de lateral derecho del Southampton, a mediados del siglo XIX atribuyó dicha expresión a un destacado político escritor que se llamaba Edmund Burke, quien la pronunció en el debate de apertura de la Cámara de los Comunes del Reino Unido en 1787. Aquí no dicen si es por la mañana, por la tarde o después de comer. Pero lo dijo allí en ese momento. Edmund, porque como no me aclaro con el apellido,

ya va a ser para mí Edmundo, dijo que había tres poderes en el Parlamento, señalando que la tribuna de prensa era donde se sentaba el cuarto poder, que era el más importante de todos ellos. Dijo esto porque era muy curioso que en ese momento la prensa ocupaba el cuarto espacio de los escaños en el Parlamento inglés al lado de quienes ocupaban los otros tres, que eran los lores espirituales, que eran los representantes

de la Iglesia, los lores temporales, que eran los de la nobleza, y los lores comunes, que eran los políticos. Pero que digo yo, que entre tanta gente allí, los lores que habrían salido eran los lores corporales ellos. Venga, pues ya sabemos otra cosita más. Vengámonos. Sacando lo que saben cuando les interesa, porque es lo que básicamente hace la prensa. Tiene muchísima más información de la que conocemos.

Eso es. Pero no solo la prensa tiene este poder, el gobierno también tiene este poder, porque el gobierno tiene todos los datos habidos y por haber que tú puedes conocer o desconocer. Por ejemplo, yo siempre pensaba en la gestión del COVID cuando todos pensábamos cualquier cosa de cómo no nos dejan salir a la calle. Ellos tienen toda la película, toda la foto encima de la mesa. Saben cómo está funcionando todo

mientras estamos confinados. Saben todo lo que está pasando en todo el país mientras que nosotros no. Esa información nos la podían dar o no, dependiendo de lo que querían que nosotros hiciéramos. Literalmente es que fue así. Era una manera de tenernos más controlados y de dirigir nuestra opinión en un rumbo o en otro. Deje de hacer por sobre ti, efectivamente. Pero es que no solo la tiene el gobierno,

también la tienen los padres hacia los hijos. Todos somos padres y todos tenemos más conocimientos que nuestros hijos por el simple hecho de que son pequeños. Entonces nosotros tenemos el poder de comunicarles y hacer que aprendan cosas o no. Y lo ejercemos a diario de cualquier manera que se nos ocurra. No tiene por qué ser negativo, simplemente... Llevándomelo otra vez al tema de las empresas y demás,

y esto habrá pasado a todos seguramente, lo de los hilos de información dentro de las empresas y la gente que retiene, los jefecillos sobre todo, que retienen información y no la comparten para ejercer poder sobre otro. Información que no es suya, que pertenece a todos los empleados, los jefes, los encargados, los clientes, los proveedores, pues retienen esa información para ejercer poder. Para ser imprescindible.

Para hacerse imprescindible, o pagar a galones, o para que da bien, o para lo que sea. Y cualquier persona que tenga acceso a una base de datos en una empresa tiene un poder de información brutal. Ya sea de cliente o de los propios empleados de la empresa. O sea, el departamento financiero que maneja las nóminas de una empresa gorda multinacional tiene bastante información sobre lo que gana cada empleado.

Pero es que un empleado de un call center, cuando recibe una llamada y queda registrado el teléfono del cliente que te está llamando, tiene toda la información crediticia del cliente. Tiene la información de su DNI, de su correo electrónico, de tal. Incluso puede ejercer el poder de información en el sentido de que dice tú, a mí este tío no me ha caído bien, yo no le voy a aplicar esta oferta que sé que existe y él no lo sabe.

Algo tan tonto como eso. Y el otro día, poniendo un ejemplo mucho más banal, una amiga de mi hija que se le da muy bien hacer el cubo de Rubik, se le da súper bien. De hecho, le han regalado los reyes uno de estos profesionales porque se le da muy bien y está practicando para ver si compite y estas cosas.

Y entonces un día le vi hacerlo bastante rápido y digo qué guay, enséñame. Y me dijo no. Y luego vaya. Y le tiraste el cubo de Rubik por la ventana, ¿no? Le tuve que convencer de que el conocimiento es mejor compartirlo. Ella en ese momento no pensaba que el conocimiento era mejor compartirlo. Ella decía no, no, prefiero quedármelo yo para ser la única que sabe hacerlo. Que esto me hace especial. Que crea un truco de magia y no lo va a decir.

Es un algoritmo. Es repetir una serie de movimientos, pero ella consideró que era mejor no contármelo para que así tenía mi admiración porque yo le estaba diciendo qué guay, qué rápido lo haces, qué bien, qué difícil me parece y qué bien lo haces. Enséñame.

No, no te enseño. Le dije que podía ver el mismo vídeo de YouTube que había visto ella. Tuve ejercicio de control coercitivo. Dijiste, eres una pedazo de hija de puta. Que me enseña te parto la cara, niña. Te parto la cara, niñata. Bueno, el caso es que vivimos en la época de la información y yo soy un firme creyente de que no hay que ejercer el poder informativo y la información hay que compartirla y el conocimiento hay que divulgarlo lo máximo posible

y de manera que más gente tenga acceso a ello. Tú eres wikike, ¿no? Bueno, pues yo creo que ya vamos plegando. Capria, algo te queda porque hoy has estado en plan Rafa, suelto al principio. Es que tenía la autoridad de soltar los tuits y los he usado. Cierto, porque te vimos el poder al principio de esta temporada. La autoridad o el poder. Voy a soltar la escurridura de los tuits. Sube la tapa, niño, sube la tapa.

Nos vemos lo que queda, lo que queda. Los pozos. Vamos con el primero de Arroba. Luis Lorenzo, ¿me da una caja de preservativos XXL de 24 unidades, por favor? Si quieres una borcita son 5 céntimos más. No, mejor me lo llevo en la mano para que vea a los vecinos a qué poderío. Eso está cogido con pinzas. Poderío, poderío. Venga, vamos con el siguiente de Arroba. ¿Quién es la máxima autoridad religiosa aquí?

Yo. ¿Quién eres? Sacerdote más sacerdote. ¿Perdón? Somos sacerdotes. ¡Oh! ¡Oh! ¡Oh! ¡Oh! ¡Qué bueno! Este voy a hacer algo que no he hecho casi nunca, pero bueno. Es de Arroba, todos jingles. Viene el tuit con una foto. Las fotos se ven hablando muy cerca. Jordi Pujol y el rey emérito don Juan Carlos I. Están los dos juntos. Y es una conversación entre ellos dos. Así que a ver cómo me sale. Rápido, hazme desaparecer.

Por última vez que no soy Yoda. Enséñame el poder de los Jedi. ¡Qué harto me tienes, Juanca! Hazlo, me paso al lado oscuro. ¡Ja, ja, ja! ¡Ja, ja, ja! ¡Ja, ja, ja! ¡Ja, ja, ja! Es que Leo Puta era Yoda total. Joder, tío. Es verdad, tío. Siempre estaba con la garganta y tenía algo. Total, total. Venga, vamos con el siguiente de Arroba. Tarugo L. Soy un líder nato. He nacido para mandar. ¡Que baje la basura!

¡Voy! ¡Ja, ja, ja! Venga, este es de Arroba. Mortimer F. Tengo el poder de la llama. ¿Dominas el fuego? No, escupo al hablar. ¡Ja, ja, ja! ¡Ja, ja, ja! Y terminamos con uno de Arroba. Doug Hannibal. ¡Cabrero! Ponme uno que valiéndose de su influencia o riqueza interviene arbitrariamente o abusivamente en la política y administración de una comunidad. ¿Un cacique? ¡Eso! ¡Ja, ja, ja! ¡Ja, ja, ja! ¡Ja, ja, ja!

¡Qué bueno! ¡Ja, ja, ja! ¡Que no me salía! ¡Ja, ja, ja! Muy bien. Pues una maravilla, como siempre. Así que venga, chavales, vamos a ir despidiéndonos. Que ya es hora. Venga, Álvaro. Adiós. Muy bien. Hoy tengo una frase... Yo sé lo que va a decir Caballeto. A ver, yo tengo una frase de Alice Walker. ¿Es esa? No, entonces no. Esa es la de Michael Jackson, ¿no? ¿Ali-Ali-Walker? No, entonces sé la que va a decir Enrique.

¿Yo? Absolutamente. La frase de Alice Walker dice que la forma más común en que las personas renuncian a su poder es pensando en que no tienen ninguno. Boza. Rafa. Nada, Enrique, yo solo me despido diciéndole adiós a la gente porque puedo. Venga, Boza. Ya está, ¿no? Yo solamente me voy a despedir, pero quería ver primero lo que decía Rafa. Y yo me despido porque tengo la autoridad para despedirme. Capriá.

Yo me despido con una frase de Leonardo da Vinci que dice nada fortalece más a la autoridad que el silencio. Muy bueno. Muy bien. Por medio. Pues nada, recordad que nuestra web es Planeta Juego. Enrique, no vas a decir... No había pensado nada. Me decepcionaría muchísimo que nos dijera para despedirte que un gran poder conlleva una gran responsabilidad. Pues me decepciono a mí mismo por no haberlo dicho. Bueno, bueno.

Desde que dijimos de grabar esto digo que se va a despedir así. Qué decepción. Muy mal. Aprovecha, dilo. Enrique, te has mostrado impotente. Me voy a robar. Bueno, pues recordad que nuestra web es planetacunao.com. Nuestra Twitter, Instagram, TikTok, todas las redes sociales de Planeta Cunao. Nuestro grupo de Telegram, telegram.planetacunao.com. Y luego, pues que si queréis echarnos una mano económicamente hablando,

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