Publicado: 10 febrero 2025
Transcripción
Hola y bienvenidos un día más a la consulta del doctor Méndez. Yo soy Roberto Méndez, médico de familia y especialista en nutrición clínica y deportiva y en ciencias y deporte. Como ya sabéis, hay algo de nutrición, de medicina, de deporte o de una mezcla de tantas. Hoy, como siempre, sea una mezcla de tantas, sobre todo basado en nutrición o, más bien, en utensilios que utilizamos para nutrirnos. Hoy hablaremos sobre las sartenes antiadherentes y los químicos eternos.
Ya hemos hablado alguna vez de de estas sustancias que son disruptores endocrinos, es decir, alteran nuestros ciclos hormonales en general, pero hoy será un poquito más de forma específica. Los los químicos eternos seguramente os sonarán, son los compuestos perforados o pufas, como los llamo yo, realmente pufas nos habían dicho porque pufas realmente es un tipo de de ácido graso, ¿no? PUFA, pero las las siglas de los compuestos perforados o perforo alquilados es PFAS, ¿vale? Entonces, hoy hablaremos sobre todo del tema de las sartenes antiadherentes porque estos químicos existen un montón, ¿vale? Pero se utilizan como recubrimiento de las de este tipo de sartenes.
Entonces, recientemente, el doctor Aurelio Rojas, cardiólogo, hizo un reel en su Instagram hablando de este tema, y nosotros lo sacamos en en el periódico de Español, un artículo que os dejaré, como siempre, enlazado en las notas del programa. En este caso, lo que comentó el doctor Rojas es lo algo que ya sabíamos, si la sartén antiadherente está bien, o sea, si no hay ningún tipo de daño o rasguño de más, en principio es un tipo de utensilio seguro. De hecho, llevamos utilizando muchos años, aunque se han ido reajustando las sustancias que pueden utilizarse como recubrimiento antiadherente. Pero el teflón, por ejemplo, es uno de esos compuestos que hoy en día aún se sigue utilizando. Y lo que nos comentaba nos nos comentaba el doctor Rojas es que un mínimo rasguño, o sea, una un mínimo deterioro de ese tipo de sartenes, sobre todo de la sustancia antiadherente, como es el caso del tefrón, conllevaría mucho riesgo para la luz, porque lo que se ha visto es que estos mínimos daños implican una liberación de millones de microplásticos y químicos eternos que acaban absorbidos por el ser humano porque usamos estos utensilios para cocinar, ¿vale?
Según comenta el doctor Rojas, en estudios recientes, que también nos enlace en el artículo por si queréis profundizar, se sugeriría que un shippe rasguño en una sartén de teflón puede liberar millones de micropartículas y químicos como los compuestos per cloro alquilado alquilados o pufas, ¿vale? Conocidos como químicos eternos, ¿qué significa? Que nuestro organismo no es capaz de degradarlos, de hecho, ni nuestro organismo ni ninguno, ¿vale? Según comentan los otros estudios, el teflón o politetrafturoetileno, PT PTFE, es un plástico sintético con una elevada estabilidad química, térmica y eléctrica. ¿Qué quiere decir?
Que es un material idóneo para revestir sartenes, sin olvidar su extremadamente bajo coeficiente de fricción. ¿Qué pasa con esto? Que como material es la repara, ¿no? Está muy bien, pero la seguridad de su uso está entredicho, porque si hay un mínimo rasguño, como hemos comentado, también se ha demostrado que puede afectar a salud humana. Mientras esté íntegro, todo va muy bien, pero si hay algún mínimo rasguño, ya la hemos liado, ¿vale?
Ya hay estudios previos donde nos decían que los compuestos perforados, en general, se relacionarían con problemas para la salud. Además, cuando se aplican altas temperaturas sobre estos utensilios de tefrón junto a la fricción de un objeto duro, por ejemplo, una espátula, la la fricción liberaría ya micropartículas que no dejan de ser microplásticos que acaban siendo absorbidos por el ser humano, y estos no se van, ¿vale? O sea, una vez absorbemos estos microplásticos, ahí se quedan para siempre. Cualquier medio daño implicaría liberación de estas sustancias y estarían siempre con nosotros, así que habría que tener en cuenta qué tipo de utensilios utilizamos para cocinar y, en este caso, el doctor Rojas lo que hacía era recomendarnos utilizar otro tipo de de sartenes, como, por ejemplo, serían las sartenes de acero inoxidable o, incluso las sartenes de cerámica o hierro fundido. Pero esto no es lo único, ¿sabes?
¿Qué daños pueden hacer los compuestos perforados al ser humano? La verdad es que se desconoce, hoy en día no sabemos cien por cien todos los daños que estos compuestos pueden llegar a producirnos. De hecho, no os lo he enlazado aquí, pero salió hace poquito que lo estuve leyendo también. Ya habían estudios que nos decían que en el ser humano, en este caso fue en pacientes con Alzheimer, se absorberían microplásticos que acabarían en el cerebro. No se sabe si tiene algo que ver, ¿vale?
Han ido aumentando los casos de demencias entre el Alzheimer y demás, pero también hemos aumentado la esperanza de vida a largo plazo, o sea, hace cien años no era tan fácil llegar a los ochenta o noventa años que llegamos hoy en día, y cuanto más edad tiene una persona, más riesgo tiene de enfermar y, evidentemente, más riesgo de demencia, porque es una enfermedad extremadamente relacionada con el envejecimiento o el mal envejecimiento.
Entonces, no se sabe si el tema de
la absorción de micro ya hipotetizando y se está investigando. Pero este no sería el único daño, o sea, no no solo será relacionado con un aumento de riesgo de emergencia, sino que otros estudios, como el que otro que os enlazaré en las notas del programa, nos dirían que si queremos perder peso deberíamos dejar de usar sartenes antiadherentes. En otro estudio, en este caso publicando en Plus Medicine, esto fue en año ya dos mil dieciocho, que ya ha llovido, ya han pasado siete años desde este artículo, lo que se vio es que los compuestos perforados, unas sustancias que se que, aparte de estar en sartenes, también se ven en ollas, en las placas de papel y en papel antigrasa, se habrían relacionado con la capacidad para perder peso o, en otro, dicho de otra manera, obstaculizarían la pérdida de peso. Tras analizar a seiscientas veintiún personas obesas y con sobrepeso durante dos años, se descubrió que hubo una una pérdida de peso durante los primeros seis meses de estudio, con una media de seis coma cuatro kilos perdidos, pero durante los siguientes dieciocho meses se recuperaron dos coma siete kilos. Según este trabajo, hubo relación entre aquellos que ganaron más peso y las concentraciones sanguíneas de compuestos perforados, es decir, aquellos que tuvieron más efecto rebote, ¿no?
Por decirlo de alguna manera, eran precisamente los que más compuestos perforados tenían en sangre. De media, las mujeres tenían unos niveles de compuestos perforados más altos y recuperaron entre uno coma siete y dos coma kilos de peso respecto a las mujeres con los compuestos más bajos. Lo que se supone, o lo que indican los investigadores, que los compuestos perforados, que se han usado desde hace más de sesenta años, que ya es poco, lo que harían serían obstaculizar el metabolismo. Se acabarían formando parte de la cadena metabólica y ralentizarían nuestra quema de grasa, entre otros posibles daños. De hecho, ya se se está viendo que estas sustancias químicas se relacionarían con un aumento de riesgo de cáncer y, en casos muy raros, llegarían a incluso a producirlo, pero, como digo, es algo que se está investigando.
Luego, por otro lado, también se ha visto, o también se hipotetiza, que los compuestos perforados, como por ejemplo, el teflón, que es el que más se utiliza, aumentarían el riesgo de tumores de hígado, tumores de páncreas y tumores esticulares, al menos en estudios con animales. De nuevo, aún hay que investigar sobre si estos compuestos también tendrían ese mismo efecto en el ser humano. Por ejemplo, el teflón, como tal, se llegó a acusar de que podía tener daños para la salud, pero lo que hemos comentado antes. No no se no se sabe, bueno, no se sabe. Se sospecha que lo que decíamos de que cuando se utiliza algún tipo de espátula, algún tipo de utensilio, ya se empieza a liberar micro plásticos que evidentemente no los vemos, pero lo que sí que se ha demostrado es que cuando hay un daño en el utensinio en sí, como por ejemplo las sartenes, sí que se liberan millones de partículas.
Entonces, el de front íntegro no, pero cuando hay un daño sí. En el año dos mil diecisiete ya se prohibió el empleo del ácido perfluoro octanénico, que se utilizaba como sustancia de adherente en la Unión Europea, y a partir de ese año ya se quitó. La Comisión Europea estableció una moratoria que, en algunos casos, se se amplió hasta el año dos mil tres, pero ya es posible encontrar muchos establecimientos donde el reclamo es PFOA free, es decir, sin este compuesto, ¿vale? Libre de ácido perfulo optaloico. Los problemas de salud de estas sustancias serían muy raros porque, para que fueran peligrosas, deberían someterse a unas temperaturas muy elevadas en una cocina doméstica, pero podría pasar.
Además, los productores de baterías de de utensilios antiadherentes ya han comenzado a evitar materiales sospechosos en general. ¿Qué es lo que tenemos que hacer? Pues tratar bien las sartenes. Claro, esto es complicado, porque muchas veces igual se nos pasa un un poco el tiempo con el tema de la sartén, rascamos mucho porque la comida que sea se ha quedado adherida, por mucho que la sartén sea antiadherente, pueden pasar veinticinco mil cosas en el momento de utilizar una sartén de este estilo. O sea, realmente el ser humano no lo hace a posta, al final no no buscamos tampoco dañar nuestra salud, pero si no sabemos con qué estamos cocinando, pues puede pasar esto.
En primer lugar, nunca deberíamos limpiar la sartén directamente, esto, por ejemplo, lo digo medio riéndome porque esto lo he hecho un montón de veces y ahora, evidentemente, ya no lo hago, pero es muy típico echar un chorro de agua fría justo cuando la sartén está caliente. ¿Qué pasa? Que esto hace que la capa antiadherente salte un poco. No es que de repente se pele como si fuera una piel de lagarto, pero evidentemente esa micropartículas acaban saltando, ¿vale? Tampoco es también manipular la comida que estamos cocinando con utensilios metálicos, porque pueden rallar la esta adherencia.
Ahí, en ese caso, se recomienda utilizar utensilios de madera, sobre todo para no dañar esta adherencia, ni frotarla con estropajos de material metálico, ¿vale? Estas costumbres son muy habituales, porque lo que hacemos es intentar rascar lo máximo de de los alimentos, pero a su vez estamos dañando a la sartén, ¿vale? El teflón es un material que resiste bien sin cambiar su estructura a temperaturas elevadas, pero existen otros materiales que no son tan resistentes y, como digo, al final no es un material inmortal, ¿no? En este caso no es un material que resta a cualquier cosa y, en algunos momentos, pues acaba dañándose y, como ya nos decía el doctor Rojas, pues acabamos teniendo problemas. Luego, para terminar, os quería enlazar otro otro estudio que, en este caso, lo que hace es, bueno, acusarnos a se ha demostrado que los compuestos perforados también se relacionarían con alteraciones hormonales y alteraciones del desarrollo.
Aparte de los compuestos preplorados de sarteras antiadherentes y demás, existen un montón de contaminantes químicos eternos que se encuentran en todas partes, en alimentos, en el agua potable, en el aire. Estamos expuestos diariamente a todos estos compuestos y cada vez más, porque el hecho de avanzar a nivel tecnológico implica ciertos riesgos. En el caso, por ejemplo, de de la alimentación, se habla mucho del tema de pesticidas, cada vez se utilizan menos, pero durante décadas se han utilizado pesticidas muy potentes con el objetivo de que no hubiese plagas, tener más más alimentos disponibles, demás, pero claro, ahora lo estamos empezando a pagar, porque ya se están viendo casos donde el hecho de consumir pesticidas en cantidades mínimas, a priori, no no acaba dando síntomas, pero es que si consumimos alimentos que sí que los han visto expuestos a pesticidas durante mucho tiempo, es decir, consumimos ese tipo de alimento durante años, estos compuestos sí que se acaban acumulando, es lo que se está demostrando en múltiples estudios, ¿vale? Por ejemplo, un ejemplo serían los pesticidas organocorados, que se usaban ampliamente en agricultura, en lociones y en champús, o los cloro benifenilos, perdón, utilizados como aislantes en condensadores y transformadores, y se prohibió en en Europa ya hace tiempo, pero hasta ese momento, ¿qué?
¿No? Otros, como los compuestos perforados, ya han sido muy empleados en recubrimientos a sartenes y envases de palomitas, en ropa impermeable o en textiles tapizados, y, de hecho, se se siguieron utilizando, aunque algunos de estos ya han sido prohibidos, como hemos comentado antes. Estas sustancias se han encontrado en poblaciones de todo el mundo y en todas las edades, incluyendo mujeres embarazadas. Aunque estos contaminantes, a priori, como comentaba, padecen inofensivos, su presencia y su, sobre todo, su bioacumulación sí que pueden provocar problemas, y ya lo estamos demostrando. Muchos, como ya decía al principio del programa, se consideran disruptores endocrinos, al tener una estructura muy similar a las hormonas se pueden hacer pasar por ellas, y el organismo nos, en ciertos aspectos lo reconoce, pero muchas veces no.
Entonces, estos compuestos ocupan el receptor que debería ocupar una hormona natural, son capaces de afectar a la al transporte, la producción, el metabolismo y la acción de estas hormonas. Por tanto, pueden producir desequilibrio a nivel endocrino y provocar mal funcionamiento del organismo. Seguramente el que más os sonará en este aspecto es el bisfenol A, que ya se ha prohibido en Europa, pero hay otros bisfenoles, como ya os comenté en un capítulo dedicado a los disfenoles endocrinos donde yo sabía menos que ahora, tampoco es que sea un experto, pero claro, al final de tanto escribir sobre estos temas, pues uno aprende, ¿vale? Entonces, lo que estamos viendo es que estamos expuestos a un montón de sustancias que que realmente hoy en día, algunas ya se puede saber que sí que son peligrosas, como algunos compuestos perforados, otros se siguen usando porque no sabemos si son peligrosos o no o cuán peligrosos son, pero es que encima todo el mundo está expuesto, sobre todo, como decíamos en caso de mujeres embarazadas. ¿Qué pasa?
Que ahí hay un dos por uno, ¿no? Hay afectación de la mujer embarazada y del futuro neonato, entonces ahí tenemos un problema porque no sabemos realmente qué puede pasar, y estas sustancias se transportan a través de la placenta, desempeñan un, pueden acabar afectando al desarrollo del feto y algún algunos algunas vías metabólicas, como por ejemplo, la más conocida es la la la de las hormonas tiroideas, ¿vale? Desde la red de investigación, proyecto de infancia y medio ambiente, la Inma, se ha se ha querido estudiar si la si existe relación entre las positivas y sus contaminantes y unos posibles problemas de desarrollo. Esto os lo enlazaré en las notas del programa porque seguramente a a alguien le interesará profundizar. Que se ha hecho son trabajos demostrando que el contacto prenatal con algunos fenoles y compuestos perforados se habían relacionado con alteraciones de los niveles tiroideos maternos.
En concreto, algunos compuestos perforados se habrían asociado con una disminución de los niveles de trillodotriorina o T tres, que es la hormona biodisponible de la del tiroides, ¿vale? Se habla mucho de ATSH, de AT cuatro, pero realmente AT tres es la biodisponible. Además, algunos disruptores endocrinos se habrían vinculado a una disminución o un aumento de los niveles de hormonas estimulante del tiroides, que es la TSH, que es la que regula la producción de tres T tres y T cuatro. La T cuatro es más conocida como tiroxina. En general, lo que os comentaba, se está viendo que todos esos compuestos sí que tienen una afectación hormonal, afectación también a nivel de pérdida de peso, bueno, a nivel de obstaculizar la pérdida de peso, lo que no se sabe es cómo, porque el el el estudio os comentaba anteriormente realmente no ha podido demostrar una causa de efecto.
Lo que ha visto es que a mayor efecto rebote, mayores niveles de compuestos perforados había en sangre. Entonces, como os comenté justamente el programa anterior a este, perder peso no es tan fácil, o sea, aparte de que el organismo se adapta, es que encima tenemos que luchar, entre comillas, contra todas las sustancias a las que nos exponemos. Yo yo recuerdo hace unos años que cuando leía, bueno, cuando veía algunos vídeos de de algunos divulgadores y demás sobre estos temas, decía, esta gente está exagerando. Pues no está exagerando tanto, la verdad es que estamos expuestos a mil sustancias, y lo dicho, a priori una una exposición aguda no es habitual, quiero decir, no nos exponemos directamente a un compuesto perforado a altas dosis que puede provocar síntomas muy evidentes de intoxicación, pero con el tiempo sí, algunos típicos que hemos comentado al programa, por ejemplo, son los metales pesados, el tema del mercurio en los pescados, o en otras en en otros posibles orígenes, pero es que los compuestos perforados tampoco se ven, quiero decir, son sustancias microscópicas o o nanoscópicas y no sabemos cuánto estamos consumiendo. Lo que sí que se está viendo, como ya salió, no sé si fue en una publicación del antiguo Twitter o o en Instagram, que salió un estudio de que cada año un ser humano consume el equivalente en micro plásticos suficiente para fabricar una tarjeta de crédito, o sea, el tampoco es que sea a priori y no no parece que sea una gran cantidad, pero estamos hablando de compuestos microscópicos, o sea, la acumulación de todos de esos de todos estos compuestos a lo largo del año darían para fabricar una tarjeta de crédito, es como si nos comíamos una tarjeta de crédito entera de plástico al año, me parece un poco burrada.
Pero claro, todo esto es bioacumulativo y con el paso de los años va produciendo una serie de síntomas que hoy en día no sabemos detectar y no sabemos relacionar con esto, porque no hay estudios que nos digan, pues tienes tantos compuestos perfumados en sangre o tantos micro plásticos, no es no es una prueba que exista para hacérselo a pie de calle. Entonces, nada, lo de siempre, habrá que seguir estudiando, habrá que seguir viendo qué relaciones hay realmente con la salud, si estos compuestos están implicados en determinadas enfermedades y hoy en día no lo sabemos, pero con el tiempo, pues gracias a a la investigación y a la evidencia científica, pues acabaremos abriéndolo. Como siempre, gracias por escuchar, gracias por ver esto si lo veis en YouTube, y como siempre, esto se colgará en Konda Podcast y se subirá a todas las demás plataformas, incluyendo las más conocidas, Spotify, PocketCast, iVoox, Apple Music, Amazon Music, la que queráis. Nos vemos y nos escuchamos en siguientes episodios. Hasta la próxima.